La familia de una interna de la residencia de ancianos de Camarzana de Tera critica el trato que se dispensa a la residenta, así como denuncia "las irregularidades" del centro geriátrico debido, según expone, "a la insuficiencia de personal".

La hija de esta interna, que lleva varios años residiendo en el centro geriátrico, ha elevado por escrito sus quejas ante los Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León reclamando que la administración intervenga "lo más pronto posible".

En el escrito de queja al que ha tenido acceso este diario se refieren por parte de la denunciante situaciones "preocupantes" para la familia de la interna como las escaras que sufre en la cadera debido a lo que consideran una mala praxis. "Mi madre tiene unas escaras exageradas y mal curadas, con apósitos sucios", asegura la denunciante aduciendo haber preguntado sobre el particular a personal responsable del centro y recibiendo como respuesta: "es una rozadura". La persistente situación, "ya que me salía de ojo tanta rozadura", hizo que la hija de la afectada retirase los apósitos y descubriera las escaras en la piel.

La hija de esta interna en el centro geriátrico de Camarzana de Tera achaca esta situación "a la insuficiencia de personal", advirtiendo que "el facultativo se encuentra de vacaciones y no ponen sustituto, al igual que ocurre con la ATS", asegura apostillando que el médico vive en Valladolid "y si algo pasa se le consulta por teléfono", reflejan en el escrito.

La desinformación sobre el estado de su madre es criticada por la familia de la interna en el escrito remitido a Servicios Sociales advirtiendo de tomar medidas al respecto con el fin de que se solvente "lo más pronto posible" esta situación, que consideran "anómala".

"Es mi madre y aguanto lo que sea, pero hay cosas que no se pueden aguantar" apostilla, en referencia a una mala contestación, según alega, al preguntar por el estado de salud de la interna, así como a una debida falta de atención. La hija de la interna asegura en su misiva a Servicios Sociales que ha debido de cambiar la ropa y limpiar a su madre ante esa "falta de personal" del centro geriátrico.

Esta residente en el centro geriátrico de Camarzana de Tera precisa además de un audífono y, según la denunciante, el personal del centro se lo retira con la finalidad de que no se le rompa al caerse.

Las críticas ante Servicios Sociales de la Junta alcanzan también a una techumbre en el comedor y la elevada temperatura de la habitación, ya que en días pasados, con una climatología de altas temperaturas, el termostato de la habitación registraba 30 grados.