La grúa instalada hace una década en uno de los solares de la desparecida plaza de Toros fue retirada ayer por la mañana. La empresa propietaria, Ledesma y Granados, explicó que la retirada de la grúa obedece "al interés general y por respeto al medio ambiente". A su juicio, el Ayuntamiento, dictando una orden de ejecución de retirada, "ha actuado de forma abusiva y con desviación de poder".

La orden de ejecución municipal se produjo después de que los técnicos municipales comprobasen que la propiedad no había aportado la documentación que acreditara la seguridad de la instalación, como sí había venido haciendo hasta la fecha.

Según el Ayuntamiento, la propiedad no recurrió con anterioridad las exigencias periódicas de retirada municipales ante el Juzgado de lo Contencioso Administrativo y ahora no ha aportado la documentación acreditativa de la seguridad de la grúa. Los técnicos municipales tasaron la retirada subsidiaria en 3.206 euros.