-Benavente no tiene tren ¿Lo considera una debilidad, sobre todo teniendo en cuenta la conexión con los grandes puertos del norte del país y la apuesta que se está haciendo desde hace años por la intermodalidad?

-Si yo tengo tren tengo una ventaja más o una fortaleza más. Si no tengo tren la intermodalidad queda reducida. La conexión con los puertos puede ser por tren, pero hay que tener en cuenta que el puerto que más mueve hacia el interior del territorio por tren no llega al 18%. Queda un amplio margen para moverse por carretera. El ferrocarril de mercancías en España mueve el 3% y la carretera el 97% restante. Con lo cual, claro, es una debilidad. Y si tengo un aeropuerto al lado, mejor, aunque no sirva para nada. Pero mejor. El tráfico aéreo de mercancías en España es del 0,15%. Ahí hay proyectos. Zaragoza tiene ferrocarril, tiene aéreo. Salamanca va a hacer conexión con los puertos portugueses? Es una debilidad, sí. Es importante, yo creo que para una posición estratégica de Benavente creo que no.

-O sea, que Benavente no tiene que obsesionarse, a su juicio, por no tener tren.

-Por supuesto. No hay que obsesionarse con la falta de tren. Además, a qué puertos puede servir Benavente por ámbito natural, pues Vigo, La Coruña, Gijón, Avilés? Y esos puertos qué mercancías mueven, en cuanto a mercancía de contenedores que es la que se dedica a importación y exportación, pues muy poquito.