Benavente ha comenzado ya la cuenta atrás para las Fiestas del Toro. Cientos de personas se dieron cita ayer en la Plaza Mayor para vivir uno de los actos más multitudinarios de los celebrados a lo largo del año en Benavente, el de la petición del toro. El alcalde, Luciano Huerga, cumplió con la tradición y volvió a salir al balcón central de la Plaza Mayor para dirigirse a una multitud que ya gritaba "toro, toro, toro" y que, en gran parte, estaba ya bañada en vino y sangría.

Huerga hizo un discurso de algo más de cinco minutos en el que no dejó de incitar a la plaza a que gritaran "toro, toro, toro" antes de concederlo. Se refirió a la Plaza Mayor como "la más bonita de toda España" en esta jornada en la que hubo un recuero emocionado para todas aquellas personas "que nos han dejado, pero también para aquellos que durante muchos años han venido a esta plaza a decir toro, toro, toro... También para los que no están hoy, porque no han podido asistir pero su corazón está aquí".

Pero si hay algo que destacó en su discurso fue su alusión a la tradición de este festejo para el que pidió "respeto". Antes de empezar a conceder el toro "permitidme que diga que la gente a la que le gustan los toros tienen derecho a decirlo. No nos tienen que doler prendas en decirlo. Exigimos respecto por nuestra cultura, por nuestras tradiciones, el respeto que nos merecemos" y concluyó con un "viva Benavente y su cultura taurina".

Se dirigió también a un numeroso grupo de jóvenes que haciendo caso omiso a la petición de días previos de dejar a un lado las botellas de vino para permitir disfrutar de la fiesta a todos y recordó que "el único color rojo que quiero ver es el de nuestros pañuelos. Lo podemos pasar bien, es nuestra obligación, vamos a disfrutar como merecemos. Pero os pido que disfrutemos de una forma saludable y de una forma razonable. Queremos que esta sea una fiesta de todos y para todos".

Lo cierto es que sí se vieron los pañuelos rojos que se fueron repartiendo en los accesos a la plaza por voluntarios de Protección Civil, aunque no fueron precisamente los jóvenes los que optaron por cambiar las botellas de vino o sangría por estos pañuelos.

Luciano Huerga finalmente concedió "los toros hinchables, los encierros y el torito del alba", repetirá un toro de las peñas el sábado de las fiestas y también habrá toro el miércoles 14 de junio. Su imagen pudo verse en la Plaza Mayor al desplegar un gran cartel con su fotografía para el disfrute de todos los que acudieron a este tradicional acto.

No parece haber calado en la juventud los mensajes del Ayuntamiento de cambiar la botella de vino por un pañuelo rojo, según los voluntarios de Protección Civil que realizaron esta labor en los accesos a la plaza. En esta ocasión desde las doce del mediodía y aprovechando el buen tiempo grupos de jóvenes fueron cogiendo sitio para ocupar el centro de la plaza y no dudaron en echarse por encima litros y litros de vino y sangría tiñendo de rojo las camisetas.

En este sentido, el alcalde de Benavente señaló que "lo fundamental es comenzar a concienciar de que otra fiesta es posible. Los jóvenes tiran vino y sangría para exteriorizar su alegría cuando no es necesario. A veces hacen lo contrario de lo que se les dice. Esto es una cuestión de años pero también de responsabilidad, y no vamos a dejar de decirlo".

El subdelegado de Gobierno, por su parte, puso en valor las medidas disuasorias promovidas desde el Ayuntamiento y pidió responsabilidad a la hora de conducir. "Alcohol cero a la hora de coger el volante", señaló.