El Ayuntamiento de Benavente, siguiendo las recomendaciones del perito judicial, ha decretado la ruina inminente del edificio ubicado en el número 8 de la calle La Rúa, ubicación de la desaparecida librería Gráficas Unidas, lo que hace peligrar el recorrido del Toro Enmaromado, que tendrá lugar dentro de dos meses.

El decreto municipal da tres días a la propiedad para comience a ejecutar numerosas actuaciones para garantizar la seguridad durante un plazo de tres meses.

Entre las actuaciones que figuran en la orden de ejecución municipal se encuentran el vallado perimetral del edificio para evitar daños, y la eliminación de escombros, enseres, basura y palomina, así como aquellos revestimientos de elementos estructurales que se encuentren desprendidos y oculten el estado real de otros elementos portantes.

Se pretende de esta forma que de manera urgente se puede proceder al apuntalamiento de 1a estructura y de la escalera del edificio y a la retirada de los elementos de los dos faldones principales de la cubierta y sus troneras, a la retirada de los escombros y a la recuperación de aquellas piezas que se encuentren en buen estado de conservación, al tratarse de un edificio protegido.

Todas las actuaciones recogidas en el decreto de declaración de ruina inminente del edificios se han dictado con el fin de "eliminar los riesgos existentes; tanto para las personas como para los bienes", además del propio inmueble que goza de protección estructural en el catálogo del Plan General de Ordenación Urbana de Benavente.

El Ayuntamiento, que había presupuestado fondos para acometer de forma subsidiaria la conservación del edificio, se ha visto en la tesitura de declarar ahora de forma urgente la ruina inminente del inmueble a raíz del contenido de un informe pericial encargado por el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo de Zamora que se hizo público durante la vista por el recurso planteado por los propietarios, entre ellos, el que fuera concejal de Urbanismo del PP, Camilo Hernando.

La consecuencia directa de l vallado sería un estrechamiento notable de la calle La Rúa que obligaría a repensar el recorrido del Toro Enmaromado. Aunque el itinerario llegó a variarse hace décadas y se sustituyó la carrera de la Rúa por la calle Herreros, la regulación del festejo tradicional benaventano obligaría a solicitar y a obtener la autorización específica de la Junta de Castilla y León.