El alcalde de Benavente salió ayer al paso de las críticas que le dirigió el sábado el vicesecretario de Organización y Electoral del Partido Popular y presidente del PP de Zamora, Fernando Martínez-Maillo, y le negó "credibilidad para venir a la ciudad a dar clases de democracia a un gobierno legítimo".

Martínez Maíllo acusó a Luciano Huerga de llevar camino de superar al exalcalde socialista Manuel García Guerra "en prepotencia" y cuestionó "el pacto en los despachos" de PSOE e IU para arrebatar la Alcaldía al Partido Popular "que fue quien ganó las elecciones".

"Ningún dirigente de un partido investigado puede dar lecciones de democracia", replicó ayer Huerga antes de que el PP, "el partido de Bárcenas y de Valencia" es la única formación política en España "que ha sido imputada por presunta corrupción". "No se debería atrever a dar lecciones de comportamiento a esos niveles de adoctrinamiento y con esos calificativos. Yo creo que no debería y no dar lecciones de democracia perteneciendo además un partido que carece de ella y que es incapaz de llegar a acuerdos tanto a nivel nacional como a nivel local" dijo y añadió: "todos conocemos al señor Maíllo y su credibilidad. Se le conoce por sus falsedades y mentiras, y por eso ha llegado tan alto en su partido, porque tiene la misma credibilidad que un billete de tres euros".

Huerga advirtió también que "si Fernando Martínez Maíllo es el encargado de regenerar el PP será un absoluto fracaso" porque "su elección es un error igual que la elección como candidato del señor Rajoy". El alcalde benaventano se refirió a la "actitud dictatorial y poco democrática" del número "porque no solamente su elección sino hasta su sucesor ha sido colocado dedo, con lo cual no parece que sea el más indicado para hablar de prepotencia y dar lecciones de honradez".

También ha afeado al dirigente popular que "haya venido a meterse con un gobierno absolutamente legítimo". "No es la primera vez", dijo. "Ya lo hizo con Rajoy en aquel acto ridículo en el que acuño aquella frase del alcalde que dio a conocer a España entera. Entonces pusieron en duda la legitimidad de la democracia y dieron un mal ejemplo con un comportamiento incívico subidos en un banco lanzando diatribas. Siguen meses después sin entender la democracia y no parecen entender que nuestro gobierno es democrático y legítimo que suma más votos y concejales.

De hecho el PP estuvo más cerca de no conseguir el octavo concejal que de ganar las elecciones. PSOE e IU sumaron 3.800 frente a los 3.200 del PP, y lo mismo vale un voto del PP que uno de IU o del PSOE", argumentó. A su juicio, el Partido Popular debería dejar de guiarse "por el cinismo y la hipocresía". "Y digo esto porque no sé qué opinan los 170 municipios donde gobiernan sin ser la fuerza más votada. Pero vistas sus palabras el PP provincial y nacional siguen sin asumir su derrota política un año después. Se ve que piensan: estos están ocupando nuestro puesto. Tal vez por eso se prodiguen en criticas personales, comportamientos desleales, decir a todo que no y, sobre todo eximiéndose de su mala praxis y mala gestión por haber dejado obras defectuosas, errores que nos han obligado a devolver fondos y para colmo pretende apoderarse de la buena gestión que ahora estamos haciendo diciendo que eso lo hicieron ellos".

Huerga lamentó también la comparación con el exalcalde Guerra. "Por respeto no nunca diría que Mayte Martín Pozo es la presidente de paja de la Diputación Provincial puesta a dedo cuando quien maneja realmente los hilos es el señor Maíllo. Y no voy a compararle con sus antecesores a los que ha ganado sin duda en pérdida de población y riqueza, y en paro dejando una gran huella negativa de su gestión".