Las comunidades de propietarios de los edificios número 1 de la calle Santa Rafaela y número 35 de la avenida Maragatos tendrán un mes de plazo para cumplir las órdenes de ejecución dictadas por el Ayuntamiento de Benavente el pasado 23 de mayo, dos días después de que una violenta tromba de viento lanzase una carpa instalada en la calzada contra el tendido eléctrico de la que quedó colgada, arrancando los anclajes de ambas fachadas y causando daños severos.

Los servicios técnicos giraron visitas a la zona durante tres días y recomendaron crear un área de seguridad vallando y señalizando el perímetro, cortando el tráfico rodado y prohibiendo el paso peatonal por la acera de la zona afectada debido al riesgo de desplome.

El Ayuntamiento requirió a la comunidad de propietarios de calle Santa Rafaela 1 para que de forma inmediata procediera a la eliminación de los elementos del cerramiento que conforman la esquina del inmueble, y a la propiedad del número 35 de la avenida Maragatos para que reparen el enfoscado y la pintura del canto del forjado de la terraza entre la planta primera y segunda afectadas por el incidente.

Casi veinte días después del suceso, las comunidades de propietarios estaban pendientes de adoptar aún acuerdo de contratación de proyectos. La comunidad de propietarios del edificio de la calle Santa Rafaela tenía previsto reunirse anoche para abordar la elección de dos proyectos diferentes, uno de ellos presentado por la compañía de seguros. En los últimos días también se habrían producido contactos entre las empresas aseguradoras de los inmuebles y de la empresa hostelera que montó la carpa.

Ayer, el Ayuntamiento advirtió a los afectados que la demora acumulada en el inicio de los trabajos de reparación y de eliminación de los riesgos de desplome podría ser objeto del cobro de tasas por la ocupación de vía pública.

El tramo de la avenida cerrada al tráfico, que permanecerá así hasta que desaparezca el peligro de desprendimientos, constituye una de las principales vías de entrada y salida de la ciudad y está comenzando a causar trastornos a los vecinos. La oposición pidió el martes una comisión informativa extraordinaria para que el equipo de Gobierno informe detalladamente de la situación.