Un aguacero tan anunciado como pertinaz arruinó anoche el desfile central de las fiestas de carnaval. Desde las siete de la tarde y en crescendo, la lluvia hizo acto de presencia de presencia, puso a remojo a los participantes y diezmó la participación de inscritos.

La Concejalía de Festejos, entre el dilema de suspender el desfile o darle continuidad, decidió dar la oportunidad de desfilar a quién tuviera el ánimo de hacerlo pero aplazó el concurso de disfraces y la entrega de premios. Unas 200 personas, mayormente jóvenes, le pusieron buena cara a la tromba de agua y se atrevieron a calarse haciendo el recorrido. Fue el 20% de los participantes inscritos, sin contar los que desfilaban fuera de concurso.

La Sala Lagares, que tenía que recibir al público disfrazado, se abrió de forma inmediata para acoger a la gente.

Así las cosas, el concurso de disfraces tendrá lugar hoy domingo en la Sala Lagares. La Concejalía de Fiestas decidió darle una segunda oportunidad y agruparlo con el desfile infantil. No habrá variación horaria. Comenzará a las seis de la tarde, como estaba previsto, aunque la organización ha pedido a los participantes inscritos que acudan a partir de las 17.15 horas a la avenida de Maragatos para facilitar los preparativos de manera ordenada. Los adultos tendrán que aportar su número de inscripción.

El fallo del jurado en el concurso de disfraces y la entrega de premios tendrá lugar a las nueve de la noche en la Sala Lagares, según confirmó la responsable de Fiestas, Patricia Martín.

El tiempo dará una tregua hoy si las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) se cumplen. Tras haber estado a remojo, Don Carnal podrá exhibirse a conciencia. Entre la seis de la tarde y las doce de la noche, el riesgo de precipitación es del cero por ciento.