El equipo de Gobierno ha renunciado, o al menos de momento, a reflotar el centro de sacrificio para esta actividad. Ha decidido por contra reutilizar las dependencias, primeramente como almacén municipal, pero sin descartar otros usos que puedan ir surgiendo como ha ocurrido en otras poblaciones y capitales con los antiguos mataderos.

La Concejalía de Medio Ambiente mantuvo contactos antes de finalizar diciembre con una empresa especializada para evaluar el coste del material que se conserva en el interior del viejo centro de sacrificio y ponderar la posibilidad de ofrecerla como contraprestación a cambio de sanear y limpiar todas las dependencias y tirar algunos tabiques internos.

La idea sigue su curso y es sencilla: la chatarra pagará el saneamiento de las dependencias. Los técnicos municipales han comenzado a redactar el pliego de condiciones para licitar este servicio de limpieza a cambio de los restos de aluminio y de metal que quedan en el interior y no se llevaron los ladrones en los últimos 14 años. "Queremos que quede diáfano para comenzar a usarlo como almacén, o al menos una parte, porque es muy grande", explica el concejal de Medio Ambiente, Manuel Burón.

Tras años de saqueos y de abandono, las instalaciones se encuentran muy deterioradas y hace tiempo que parece poco probable que la iniciativa privada pudiera estar interesada en hacerse cargo de unas dependencias viejas y obsoletas que requerirían una fuerte inversión para homologarlas a las normativas nacional y comunitaria vigentes. Desde 2007 hubo una cooperativa interesada en las dependencias que terminó descartando la reforma, y un grupo de empresarios locales y de Tábara que hicieron lo mismo tras recibir un estudio de costes para recuperar las instalaciones. La cuantía de la reforma no era asumible, explicaron entonces.

Hoy por hoy, las instalaciones no tienen más uso que el de campa externa para los contenedores de basura orgánica en mal estado, que ya no se utilizan y se apilan en la zona exterior del centro de sacrificio hasta que sean desechados completamente.