La ciudadanía podrá participar en los Pleno municipales del Ayuntamiento de Benavente a partir del próximo año 2016.

Se trata de una de las medidas incluídas en el programa electoral de las municipales y consiste en la formulación de ruegos y preguntas que, registradas con anterioridad a la fecha del debate, serán respondidas durante el transcurso del Pleno.

Para ello, el actual equipo de Gobierno está elaborando un Reglamento de Participación Ciudadana junto a los técnicos municipales.

"Hay que ver la viabilidad jurídica y administrativa, además de cómo adaptarlo a la realidad municipal de Benavente", explicó el alcalde, Luciano Huerga, quien pide responsabilidad a la ciudadanía para no usar el instrumento como arma política o acusación personal y tener así una "participación real".

Aunque aún debe concluirse el Reglamento para saber los detalles del mismo, la idea inicial es que las cuestiones puedan emitirse tanto a título individual como de manera colectiva, a través de asociaciones.

Si todo marcha como el equipo de Gobierno espera, el asunto se llevará a aprobación en el primer trimestre del nuevo año y podría entrar en funcionamiento en marzo de 2016.

El asunto es también uno de los acuerdo firmados en el pacto del actual Gobierno entre Partido Socialista e Izquierda Unida, tal y como avanzó este periódico el pasado domingo.

La propuesta ya había sido planteada desde la oposición, como hizo el PSOE en enero de 2014, cuando pidió a través de una moción "la elaboración de un Reglamento de Participación Ciudadana, la existencia de foros de participación ciudadana en la web municipal o la publicación de una la lista y/o la cuantía de operaciones con los adjudicatarios y contratistas, además de los proveedores, más importantes del Ayuntamiento".

Tanto PSOE como IU abogan por mejorar esos procesos de transparencia e información, fundamentalmente a través de la página web, donde, por ejemplo, se pueden consultar los salarios de cada uno de los concejales.

El Reglamento de Participación Ciudadana supondría un paso más para acercar la institución local al pueblo, que tendría la posibilidad de intervenir con sus ruegos y preguntas en el foro de debate de la democracia.