La ancestral tradición de instalar los mayos en las plazas de los pueblos se volvía a renovar como se viene haciendo año tras año coincidiendo con la entrada del mes de mayo. Un recorrido por la comarca, de mayo en mayo, forma parte de un ejercicio placentero comprobando la originalidad de cada uno de los pueblos de la zona. El denominador común se basa en el tono reivindicativo o en señal de denuncia haciéndose eco de las señales mediáticas ocurridas durante este periodo de mayo a mayo.

Los muñecos representando a los mayos se instalaron, en la última noche del mes de abril, en algunas de las localidades de la comarca, sobre postes del alumbrado público e, incluso, los más atrevidos, coronando frondosos chopos con una longitud considerable, como suele ocurrir en este caso en las zonas de plantíos. Algunos compiten por instalar en sus plazas la viga más alta como es el caso entre Burganes y Olmillos de Valverde e, incluso en Maire de Castroponce, o en la zona de la Polvorosa donde en algunas poblaciones se levantan dos grandes árboles para sujetar a los mayos. Todo vale con el fin de mantener la tradición.

En Congosta de Vidriales, fueron los jóvenes quienes en la bodega prepararon anteanoche dos muñecos a base de relleno de hierba y paja y vestidos con ropajes de faena. Eso si, la pareja de mayos instalada en la plaza del Caserón de este pueblo se tuvo que sujetar un año más con cadenas con objeto de que estos muñecos permanezcan durante todo el mes de mayo sin que sean objeto de deseo de localidades vecinas.

En Fuente Encalada, los jóvenes tambien instalaron el mayo en la plaza y en esta ocasión emulando a la fuerza política en liza, la de Podemos. En el valle del Tera no iban a ser menos, porque en Santa Croya, los jóvenes recordaron al político griego Gianis Varoufakis. Y en La Milla de Tera, en esta pequeña localidad los vecinos suelen ser los más originales año tras año. En esta ocasión no fue uno o una pareja los muñecos instalados junto a la iglesia, sino tres sedentes y tranquilos mayos sentados a la solana y llenos de dinero. La corrupción como denuncia no pasa desapercibida en esta pequeña localidad llena de historia y en la que algunos vecinos quisieron de esta forma, y en este primero de mayo, hacer un homenaje a los trabajadores, no a los sedentes llenos de dinero "a costa del sacrificio de los demás", como decía una de las hacedoras de las figuras.

En otras localidades, los mayos ya se instalan a plena luz del mes de mayo como es el caso de Santa Cristina de la Polvorosa que aprovecha la programación de los festejos de los quintos para que la mocedad ize el chopo con el mayo junto al campo de futbol, y ello en un ambiente festivo donde no falta el convite vecinal de peces de escabeche.

La tradición de instalar los mayos como símbolo de la fertilidad se sigue manteniendo a duras penas en algunas localidades de la comarca.