Los propietarios de la vivienda precintada en marzo de 2013 tras el desplome de los cuestos de la Mota reclaman al Ayuntamiento 145.500 euros por los daños y perjuicios causados durante los casi 19 meses que ha durado la medida cautelar, que se levantó el pasado mes de septiembre tras la finalización de las obras de consolidación de la ladera.

Los dueños de la vivienda, que llevaban meses preparando esta reclamación, sustentan su solicitud en los gastos derivados de la dietas y pernoctaciones de los dos moradores de la vivienda durante este periodo, en la reparación que han tenido que realizar en la cubierta del inmueble, en el arreglo del jardín y en las labores de limpieza interior de la casa y de eliminación de humedades. A estos conceptos añaden también los daños psicológicos que, aseguran, el precinto ha ocasionado a un tercer miembro de la familia.

De todas estos grupos de gasto los más cuantiosos son los derivados del gasto en manutención fuera de la vivienda durante el tiempo que ha durado el precinto y el arreglo realizado en el tejado de la casa.

Según ha podido saber este periódico, los técnicos municipales están estudiando la reclamación planteada por los propietarios, reclamación que fue registrada hace unos días.

De cualquier modo, la cantidad reclamada cuadruplica la prevista por el Ayuntamiento a partir de las valoraciones técnicas y de las estimadas por la compañía aseguradora.

La Concejalía de Hacienda llevó a cabo a finales de año una modificación presupuestaria para consignar una partida de 35.000 euros destinada a indemnizar a esta familia por el tiempo que han tenido que abandonar su vivienda debido al derrumbe de los cuestos y las obras posteriores.

Una vez estudiada la reclamación, el Ayuntamiento comunicará su resolución positiva o negativa a los propietarios que, en caso de no estar de acuerdo podrá recurrir a la vía judicial. En este caso sería un juez quien fijaría el pago de los gastos y de las posibles indemnizaciones por los casi 600 días de precinto de la vivienda. La cantidad que finalmente tenga que abonar el Consistorio le será reclamada a la compañía aseguradora, según advirtieron hace meses fuentes municipales.