Roberto Fernández Blanco (San Sebastián, 1982) lleva cinco años como socio de la Asociación Benaventana del Toro Enmaromado (ABTE), dos como miembro de la directiva que organizó el XI Congreso de Toros de Cuerda y desde el 1 de enero de este año presidente de una nueva directiva que tiene, entre sus retos, hacer que la fiesta del Toro Enmaromado de Benavente sea declarada de Interés Turístico Nacional, por lo que entre sus prioridades está "ayudar y colaborar con el Ayuntamiento para conseguirlo". Pedirán ayuda al resto de asociaciones integradas en la Federación Nacional de Toros de Cuerda para aumentar la difusión que se requiere para recibir dicha distinción. Espera que el factor económico no impida esta declaración y ve factible lograrlo si "todos estamos unidos, porque esto es algo de todos los benaventanos". En próximos días, Fernández convocará a los socios para mostrar las actividades que tienen previstas hacer durante este año, el estado de las cuentas del la asociación, así como presentar al resto de miembros de la directiva, de los cuales sólo quiso desvelar el nombre del vicepresidente, Vidal Bécares, junto a quien elaboró el libro "Con cuerda". En relación al anterior presidente, Francisco Hernández, reconoce su "lucha y esfuerzo por defender la fiesta".