Un total de 40 familias han solicitado ayuda de emergencia social al Área de Política Social e Inmigración de la Diputación Provincial de Zamora hasta el pasado mes de noviembre, según informó ayer Izquierda Unida a partir de los datos facilitados por la Concejalía de Promoción Humana y Colectivos del Ayuntamiento de Benavente.

Durante el año 2013 fueron 33 las familias que solicitaron las citadas ayudas de emergencia social, de las que 29 fueron concedidas y cuatro denegadas.

Este año la Diputación ha recibido 40 solicitudes de las que 25 han sido concedidas, tres denegadas, dos desestimadas y aún hay una decena de solicitudes pendientes de resolución.

En un comunicado, Izquierda Unida señala que estos datos constatan que la crisis económica continúa en Benavente porque "así lo demuestra el incremento de solicitudes para este tipo de ayudas de emergencia social. Casos perentorios de emergencia social y necesidades muy básicas que van más allá de los casi dos mil quinientas personas en situación de desempleo, muchas de ellas sin cobrar prestaciones".

La formación política asegura sentir gran preocupación ante este incremento paulatino de ciudadanos en riesgo de exclusión social, además de los que precisan asistencia de entidades como Cáritas o Cruz Roja. Del mismo modo se muestra preocupa por "el incremento de la caridad que prestan las citadas entidades, hoy indispensables, y que se traducen en una merma de justicia social e incremento feroz de desigualdad".

Izquierda Unida pide por ello a las instituciones autonómica, provincial y local "que incrementen las partidas económicas para este tipo de situaciones de necesidades básicas que un sector de la población precisa, y que recorten de otros gastos superfluos, en boato y propaganda o políticos".