Existen varios satélites de órbita polar con misiones meteorológicas. Los más conocidos son los de la serie NOAA.

Estos satélites siguen órbitas polares a una altitud sobre la Tierra de entre 833 y 870 km. Escanean todo el planeta en veinticuatro horas.

Los satélites NOAA más modernos, están equipados con radiómetros avanzados de resolución muy elevada que escanean en cinco canales. Se pueden confeccionar mapas de la vegetación y de la formación de las nubes, así como medir la temperatura y la humedad de la atmósfera y de la Tierra. NOAA tiene una resolución espacial de un kilómetro, la cual resulta muy útil como sistema de cartografía de recursos naturales a gran escala, para confeccionar mapas de la vegetación y de la temperatura superficial global y regional.