El Museo del Toro Enmaromado «tardará al menos tres años en ser una realidad», según confirmó ayer el alcalde, Saturnino Mañanes. El proyecto, anunciado en la Femag, no dispone aún de financiación y el inmueble, la antigua casa de aguas de la Vía del Canal, sufrirá reformas estructurales importantes que deberán determinarse con anterioridad.

El alcalde recordó ayer que los inmuebles de la Avenida de El Ferial tienen permitido en el Plan General de Ordenación Urbana una altura máxima permitida de cinco alturas, razón por la que podría ser precisa una modificación puntual en el PGOU «aunque el edificio no está catalogado ni tiene ningún tipo de protección».

La arquitecta municipal tendrá que supervisar en los próximos meses el edificio para determinar cuál es su estado y qué actuaciones se pueden afrontar. «Tendrán que revisarse los cimientos y decidir que alturas internas se le dan a las plantas, porque estos antiguos edificios tenían los techos muy altos y seguramente habrá que bajarlos. Será una obra más importante que un simple retejo», afirmó Mañanes.

El proyecto deberá incluir obligatoriamente la eliminación de barreas arquitectónicas y «es necesaria» la dotación de un ascensor que facilite el acceso desde la planta baja, que será una sala de exposición temporal, a la primera planta (zona de exposición permanente) y a la segunda, donde se habilitará el archivo documental. Por este motivo Mañanes cree que es más que probable que la reforma estructural del inmueble sea «importante» y el coste del acondicionamiento, elevado.

La ubicación

La Memoria inicial

1. Planta Baja

Será una sala de exposición temporal.

2. Planta Primera

Este espacio acogera una exposición permanente.

3. Planta Segunda

Este espacio acogera el archivo documental reclacionado con la fiesta benventana.