La Diputación Provincial retirará los restos del viejo puente derruido sobre el río Eria en Arrabalde, a la par que instalará una pasarela. Así lo anunció ayer el responsable de obras de la institución provincial, el diputado popular Manuel Vega, quien por otra parte reconocía en declaraciones a este diario la actual situación de la plataforma derribada con motivo de las pasadas riadas, advirtiendo que «estaba ya prevista esa actuación» por parte del área de Obras.

Vega señala que se va a ejecutar una acción en conjunto, la de la retirada de los restos del puente sobre las aguas y la construcción de la pasarela. Para esta última actuación, el área de Obras está a la espera de que el Ayuntamiento de Arrabalde le remita la memoria valorada solicitada este pasado verano, cuando se inauguró el frontón de la localidad, explicaba el responsable provincial quien además confía que «en la próxima semana» la memoria esté ya en poder de la institución provincial.

Vega salió ayer al paso de las declaraciones efectuadas por el presidente de La Confederación Hidrográfica del Duero, Antonio Gato, quien reclamó a la Diputación la retirada de los cascotes sobre el río, ya que constituyen un «serio peligro» para las poblaciones ribereñas en el caso de que hubiera nuevas riadas. A este respecto el diputado Manuel Vega emplaza a Gato a que la Confederación «se preocupe de cumplir con sus compromisos» como la ejecución de la presa del Eria, prevista desde hace cuatro años, señalando que «eso sí que supone trastornos a los ciudadanos del valle del Eria». Vega no considera que «el trastorno» de los restos del puente sobre las aguas sea «tan problemático como lo pone la Confederación Hidrográfica del Duero».

Estructuras metálicas

El viejo puente de Arrabalde sobre el río Eria sufrió las consecuencias de las riadas del año pasado provocando éstas su derrumbe, partiéndose en dos el tablero compuesto por vigas metálicas y hormigón y cuyos restos cayeron sobre las aguas. La fuerte corriente en aquellas fechas provocó el desplazamiento de las pesadas estructuras metálicas, varios metros aguas abajo del puente, quedando ancladas algunas de estas estructuras sobre el mismo lecho del cauce. La improvisada presa previsiblemente haría desbordar el río anegando la zona ribereña, extremo denunciado por el presidente de la CHD.

Los propios vecinos instalaron este pasado verano, aprovechando la bajada del cauce, una improvisada pasarela de madera sobre las mismas aguas construida con palés de las obras y puertas viejas, con el fin de poder vadear el río para llegar hasta las fincas de labor y no tener que dar un rodeo por la carretera. Las aguas, desde el verano hasta ahora, se han encargado de arrastrar estos materiales.