El Ayuntamiento de Arrabalde ha solicitado un trato preferente para sus vecinos pescadores del cangrejo señal en el coto ribereño de su término municipal. El primer edil, Baltasar Fernández, se dirigió por escrito al Servicio Territorial de Medio Ambiente solicitando que se tuviese en consideración a la decena de pescadores de la zona. Medio Ambiente le contesta informando que la normativa aprobada no contempla la preferencia para los vecinos ribereños, según explicó ayer a este diario, Baltasar Fernández.

El método del sorteo adoptado por la Junta entre los solicitantes para la pesca del cangrejo señal, no es del agrado del alcalde quien manifiesta la conveniencia de poder incluir a sus vecinos aunque fuese por turnos en años consecutivos. «Según el sorteo, a los vecinos no les toca nunca, así no podemos pescar», señala Baltasar Fernández.

La Dirección General del Medio Natural autorizó la pesca del cangrejo señal en un tramo comprendido en unos 3,5 kilómetros en el río Eria. Un tramo comprendido desde 100 metros aguas abajo del puente de la carretera ZA--P-1511 en Arrabalde hasta el puente de esta misma carretera en Villaferrueña. Este tramo se encuentra acotado, o lo que es lo mismo, que no es posible su pesca libre y para poder pescar se necesita obtener un permiso y el abonar la tasa correspondiente.

En este coto abierto durante todo el mes de julio se permite un máximo de 30 capturas y los permisos se conceden para los martes, jueves, sábados, domingos y festivos. Para cada permiso se permiten un máximo de 4 reteles de hasta 42 centímetros de diámetro y todos ellos identificados con una tarjeta con los datos y DNI del pescador.

Para el sorteo llevado a cabo en dependencias de la Junta se formularon 350 solicitudes , de las que sólo 15 fueron aprobadas. Una circunstancia que motiva las quejas del Consistorio de Arrabalde «ya que -según asegura su alcalde-, a nuestros pescadores no les toca nunca».

La «pescata» del cangrejo señal se está propiciando bien a decir de los pescadores, aunque califican que el cupo de capturas es demasiado pequeño.

El cangrejo autóctono que ya ha desaparecido prácticamente cuenta ahora con este «rival» señero muy apreciado por los pescadores y en este último caso se ha autorizado por primera vez en 26 kilómetros de cauces de Valladolid, en 944 kilómetros en la Comunidad Autónoma, con 61 tramos de ríos afectados y estos 3,5 kilómetros correspondientes a Zamora.