-¿En qué consisten los Premios Goya, en los que ha estado nominado?

-Son unos premios que organiza la asociación de fotógrafos de Zaragoza, que es probablemente una de las más antiguas de España. Se iniciaron por el año 1985 en homenaje al pintor de Fuendetodos. Posteriormente fue la academia de cine a los premios que otorgan anualmente quien los denominó también Goya. Se aprovechan unos de otros. Ni la Academia puede decir que ellos son los auténticos y los fotógrafos que no somos tan mediáticos, nos interesa también que se relacione por decirlo de alguna manera. Estos premios se celebran cada dos años. En la edición de este año y en la pasada se ha hecho para la gente que se decida al video profesional. Se realizan cuatro apartados como libre creación, boda, retrato y publicidad. A la organización se le enviaron unas setecientas obras y de ahí seleccionan diez, en diferentes apartados.

-Y, ¿qué obras presentó usted?

-He tenido la suerte de contar con dos obras nominadas, una en libre creación con una foto de un bebé cogido con un fondo rojo muy llamativo cortado con un fondo ocre, muy curiosa la foto. Y también una foto de boda, de unos novios que vienen caminando por la Rúa y a los que sólo se les ven los pies. Da sensación de movimiento, de avanzar. Fue la gala el otro día en Zaragoza, no es tan glamurosa como las del cine, pero sí muy emotiva donde salimos los nominados, donde se nos cita y a partir de ahí pues lógicamente tiene que haber alguien que se lleve la estatuilla. Es la cara de Goya y el autor es un escultor que se llama Paco Rayo.

-¿Cómo se sintió al estar nominado?

-Me hizo mucha ilusión cuando me nominaron. La mayor ilusión es cuando te llaman y te dicen que tu obra ha sido selecionada para optar al Goya. Cuando estás allí te das cuenta de que estás con los grandes de España. Este año ganó Lourden Martín Cabrero que se llevó un Goya en boda y el Goya en retrato, hizo doblete. Luego Carlos Yebra que es un fotógrafo de publicidad genial y para Chema Barreiro quien se llevó el Goya de libre creación. Para mí el estar nominado fue un subidón, un aliciente para seguir trabajando, para seguir investigando y hacer de esta profesión cada vez algo más grande.

-¿Se va a presentar otra vez?

-Sí, claro. Habrá que seguir trabajando de aquí a dos años. Igual no vuelvo a estar nominado nunca, pero la experiencia la he vivido. Intentaré conseguir la estatuilla con una buena foto.

-¿Qué le impulsó a adentrarse en el mundo de la fotografía?

-Herencia familiar. Mi padre es fotógrafo, está ya jubilado. Y mi hermano es un gran fotógrafo, asentado aquí en Benavente. Es una profesión muy bonita que te permite el ver que a la gente les captas sus recuerdos, le haces retratos, forman parte de su memoria y de su historia.

-Y de proyectos...

-El participar en la concursística que se presente en el mundo de la federación española a la que yo pertenezco, a través de un certamen que se hace anualmente, pero sobre todo el trabajo del día a día.

-Una recomendación...

-Que se tiren fotos. Para aprender fotografía es tirando muchas fotos y que vean la luz. Esto es importante porque la fotografía al fin y al cabo es la luz, que se guarda, que se capta.