Oye, que me han entrado ganas de participar en el concurso de Zamora 10 para alumbrar una marca Zamora. Será por lo de los 10.000 dólares de premio en el mercado internacional o los 9.033 euros (a cambio actual) en el de casa, o yo que sé, acaso por pasar a la pequeña historia de este territorio de (geografía en forma de) pistola. Lo que ocurre es que no sé nada de diseño gráfico, así que mal lo tengo. Pero bueno, ideas sí, que aquí es lo que sobra. Lástima que no hayamos sido capaces de llevarlas a la práctica, ¡si hasta fuimos pioneros en España en la institucionalización de la promoción del turismo, con aquel patronato provincial que se creó hace más de 30 años! Pues, oye, nada, que, pese a estar todos los años en Intur y Fitur, hemos sido incapaces de "vender" la provincia en el exterior, ¡con los valores que tiene! No sé por qué, pero, la verdad, fuera lo que se sigue oyendo es lo de "Zamora no se ganó en una hora", en vez de "Zamora ahora". Y es que esta provincia sigue siendo la perfecta desconocida y en vez de enamorar, como corresponde a su singularidad y variedad, se mantiene clavada, ahí, perdida, oculta por Galicia, al lado de Salamanca y Valladolid. Zamora sorprende, mantienen los visitantes que se caen por aquí de vez en cuando. No hay provincia que ofrezca tanto en tan poco territorio, apuntan otros cuando hablan de naturaleza, biodiversidad, patrimonio artístico, fiestas populares y tradicionales. O lo de las vistas al Duero, ¡para morirse de belleza¡ ¿Será verdad aquello de la Zamora líquida, que tanto nos hizo sonreír y que en su concepto global inmortalizó el sociólogo y filósofo Zygmunt Bauman? Tantos eslóganes se han inventado que parece difícil que los participantes en el concurso de Zamora 10 nos sorprendan ahora. Yo, vistos los resultados obtenidos, iría al revés. O sea, algo así, "no vengas a Zamora, que te morirás de belleza", ¿qué cursi verdad? O "pasa de largo que los grandes tesoros siguen escondidos". O "no quieras encontrar en Zamora lo que no te mereces". O "Zamora, reserva de fauna salvaje". Yo que sé, aquí va otra idea, la última: el mapa de España y un puntito luminoso con la leyenda "sopla y ven corriendo, que esto se apaga".