Don sin din, cojones en latín. La frase hecha define el juego de los políticos sobre el futuro de los territorios de España. Monta el PSOE, con todo boato y condición, el II Foro Nacional de Despoblación en Puebla de Sanabria con la presencia, por primera vez en la provincia, del ministro de Agricultura, Luis Planas, con la consigna de no hablar de diagnósticos sino de medidas concretas y si te he visto no me acuerdo. Más de lo mismo: incentivar el relevo generacional, incorporación de mujeres, digitalización, banda ancha, discriminación positiva, regadío sostenible (¿cuánto hace, por cierto, que no se pone en marcha un plan nuevo de riego en Zamora?)... Plas, plas, bien, muy bien... ¿Y presupuesto? No... eso..., es un tema de Estado... Pero hombre, si en las cuentas elaborados por el PSOE, su partido, que acaban de ser rechazadas en el Congreso de los Diputados, motivo que ha dado origen al adelanto de elecciones, no se destinaba ni un euro para paliar la despoblación. Todo lo contrario, la parte del león iba para la segunda comunidad más poblada de España, Cataluña, y no solo en cantidad global, también por habitante. ¿Qué nos quieren contar otra vez? Otro Plan del Oeste. Vamos hombre, a otro perro con este hueso. La gente está ya hasta el moño de promesas de derecha e izquierda. ¿Qué quedó, por cierto, de la convención del PP de abril del año pasado sobre despoblación?. Puro desierto, pues eso.

Pero hay más. Ayer se celebró en Madrid el Forum Europa con la intención de visibilizar en la capital las comunidades autónomas del Noroeste. Herrera parece haber descubierto que Zamora existe desde que el PSOE tiene el control del Gobierno central. ¿Por qué? Porque ahora el dinero lo tiene que poner otro. Este echar balones fuera de diestra y siniestra tiene la culpa de que solo uno de cada diez zamoranos crea que esta tierra ofrece oportunidades de vivir (encuesta Sigma Dos para Ical). Lo dicho: don sin din, cojones en latín.