La portavoz de la Junta y consejera de Agricultura, Milagros Marcos, defendió ayer su trabajo en Bruselas sobre el nuevo marco de la Política Agraria Común (PAC), después de que el procurador de Ciudadanos David Castaño le recordara que no contaba con el aval para hacer la "guerra por su cuenta" y celebrar "un acto de partido" en la capital comunitaria.
En la sesión de control al Ejecutivo del pleno de las Cortes, Marcos se mostró sorprendida de que el parlamentario la acusara de trabajar. Explicó que se invitó a los miembros de la Comisión de Agricultura del Parlamento Europeo. "No vinieron", dijo si bien señaló que los presentes aceptaron de buen grado la propuesta de Castilla y León.
"No es el momento de las comunidades autónomas, sino del Gobierno", afirmó David Castaño, quien criticó la falta de lealtad de la consejera, quien rechazó esta acusación y explicó que preguntó al ministro Luis Planas en el último Consejo Consultivo si España tenía previsto presentar enmiendas al documento marco por lo que ante su negativa, la Comunidad lo hará, sobre la financiación y sobre la orientación de los fondos a los agricultores que viven de esta actividad.
La titular de Agricultura y Ganadería destacó que este es el mandato dado por las Cortes y remarcó que la posición de la Comunidad es "sensata". Además, defendió la "absoluta lealtad" de la Junta con el Gobierno, así como la importancia del acuerdo sobre la reforma de la PAC.
Finalmente, Castaño señaló que Europa se enfrenta a un "terreno peligroso", ante el 'Brexit' y la convocatoria de elecciones en 2019. Además, concluyó que no le han dado el aval a la consejera para que vaya a Bruselas a hacer "la guerra por su cuenta".