Antonio Medina Roldán -Toro, 1963- toma las riendas de Asaja durante otros cuatro años tras salir reelegido presidente en la asamblea general de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores de Zamora, que cuenta con una masa social de 1.010 socios. En el nuevo mandato, el segundo desde que este agricultor toresano saliera elegido en el año 2013 como un hombre de consenso y sucediendo a Vicente Calzada, Antonio Medina se propone afianzar la labor reivindicativa de la organización. "Nos lo están pidiendo nuestros socios y no es que durante estos últimos cuatro años no nos hayamos movido, pero quizás no hemos sido lo suficientemente visibles en nuestras exigencias a las administraciones; nos piden más caña".

El nuevo presidente de Asaja Zamora dice haber entendido el mensaje de dar más voz a las reivindicaciones porque "la gente está muy enfadada con la situación, y con toda la razón. Este año no nos está acompañando el tiempo y eso agrava los problemas, pero es que las administraciones no están siendo sensibles con un sector importantísimo. Somos los que mantenemos el mundo rural y si tanto se les llena la boca a los políticos con los pueblos, que empiece por no poner tantas trabas y ayudar más a los agricultores y ganaderos".

Uno de los asuntos más sensibles entre los agricultores y ganaderos zamoranos es la "invasión" de la fauna salvaje y los daños que provoca en los cultivo y a las propias explotaciones ganaderas. "La gente no puede más; este año, con la gravísima sequía que padecemos, los ganaderos están viendo cómo los ciervos buscan los puntos de agua y comida que tienen para el ganado. No hay derecho, les cuesta un dinero preparar la comida para que venga la fauna salvaje a comer y beber de los comederos que pone el ganadero. A lo mejor tienen que ser los ecologistas y los cazadores los que proporcionen comida a la fauna salva y no los paganos de siempre".

Será éste uno de los asuntos que el renovado presidente de Asaja trataré en una próxima reunión con el delegado territorial de la Junta, Alberto Castro.

Los desafíos de las organizaciones agrarias pasan además por problemas de calado que trascienden a la administración autonómica y central como la reforma de la PAC. También la gestión hidrológica y un temido "impuesto del agua, del que se empiezan a oír rumore" advierte Medina.

"Si tienen el atrevimiento de poner otro canon, al final la gente abandona el campo, como estamos viendo ya algunos casos de agricultores jóvenes. Lo único que fija población rural son los regadíos y la ganadería, si se lo cargan a ver qué pasa con los pueblos".

En el ámbito interno de la organización, Antonio Medina destaca la reducción de la deuda heredada "prácticamente a la mitad". La Junta Directiva elegida en el año 2013 se encontró con un "agujero" en torno a los 800.000 euros y cuatro años después se sitúa en torno a los 400.000, confirma el presidente de Asaja.

"Esperemos que este mandato siga la misma tendencia y podamos dejar saneadas las cuentas" expresa Antonio Medina, a la vez que destaca que la controvertida medida de aumentar las cuotas y aprobar una aportación extraordinaria de 50 euros (que se suman a los 150 anuales que abona cada socio) "era necesaria; eso y la refinanciación de la deuda con menos interesas, además del aumento de las declaraciones de la PAC, nos han permitido mejorar la situación económica".