Cultivadores de remolacha de la comarca de Tábara piden a la Azucarera de La Bañeza el adelanto del arranque de raíz para evitar los problemas surgidos en la campaña pasada, cuando las lluvias entorpecieron la recolección al encharcarse el terreno impidiendo el trabajo de las máquinas. La comunicación por parte de la fábrica del inicio del arranque de la remolacha en la zona de regadío de Tábara a finales de octubre o principios de noviembre ha generado gran preocupación entre los agricultores.

Consideran éstos que las fechas establecidas por la Azucarera son "muy tardías" dadas las características del terreno y la experiencia de la campaña anterior, cuando se estuvo a punto de dejar raíz en las tierras a causa de la lluvia.

Los agricultores tabareses saben por experiencia que si se carga de agua el terreno tiene que pasar mucho tiempo para poder entrar en las tierras. A ello se suma el mal estado de los caminos, que hace muy difícil el tránsito de vehículos para transportar la raíz. Esta es otra de reivindicaciones de la comunidad de regantes de Tierra de Tábara, ya que cuando se hizo la obra del regadío los caminos quedaron en muy mal estado y la Junta de Castilla y León se comprometió a repararlos, incluso adjudicó un dinero para el arreglo pero la inversión nunca se ha llegado a ejecutar.

No volver a sembrar

Por todo ello los cultivadores de remolacha demandan a la Azucarera el adelanto "en todo lo posible" del arranque, teniendo en cuenta además que la siembra se efectuó un mes antes que el año anterior.

Los agricultores tienen muy presente la mala experiencia de la campaña anterior cuando les sorprendió la lluvia en plena recogida temiendo que no pudieran sacar la remolacha, incluso algunos se plantearon seriamente no sembrar este cultivo por temor a dejarla en la tierra.

Se preguntan por qué Toro abre a primeros de octubre y la Azucarera de La Bañeza lo hace un mes más tarde cuando los terrenos son tanto o más problemáticos que en la zona de Toro.