La Consejería de Agricultura y Ganadería apuesta por dotar al sector ovino de estructuras regionales para dar un nuevo impulso a este sector, del que Castilla y León es líder.

Una de ellas sería facilitar la creación de centros de concentración que agrupan a animales de diferentes productores para, dependiendo de la demanda del mercado, destinarlos al sacrificio o a cebaderos. El Programa de Desarrollo rural destinará 5,3 millones de euros a facilitar la creación de estos centros, muy habituales en Francia. Así lo ha explicado la consejera Silvia Clemente esta tarde en Coreses, donde ha inaugurado la jornada "Agrohorizonte 2020" sobre el sector ovino.

La consejera también ha avanzado que se está trabajando para convertir la Marca Colectiva Queso Castellano en Indicación Geográfica Protegida (IGP) y que pueda actuar como una organización interprofesional. Paralelamente, Ovigen y la Consejería desarrollarán "un proyecto de selección genómica que permitirá acortar de cuatro años a seis meses el periodo para conocer el potencial productivo del animal", según ha explicado Clemente en Coreses.

Por otra parte, la consejera se ha referido a la nueva PAC 2015-2020, "en la que el sector ovino es uno de los grandes beneficiados", aseguró, "los ganaderos pasarán de recibir 30 euros de media por oveja a recibir 36".

Durante la inauguración de la jornada dirigida a los profesionales del sector ovino, la consejera ha resaltado la existencia del Consorcio de Promoción del Ovino, que ha pedido su reconocimiento como entidad asociativa prioritaria de interés suprautonómico.

Castilla y León abastece el 76% del mercado nacional del lechazo y lidera la producción de queso de oveja, con el 72% del total de España. La provincia de Zamora concentra el 23% del censo de ganado ovino en la Comunidad, con 220.000 ovejas destinadas a la producción de carne y liderando la producción de leche con 692.000 ejemplares, un 31% del total regional.