Hoy, mayo del año 2022, podemos decir con orgullo, que juntos estamos superando una de las épocas más convulsas de nuestra historia reciente. Y estando aún con coletazos de la pandemia que provocó el COVID-19, y con otras crisis sobrevenidas por la sinrazón humana, si algo hemos aprendido es que de estas situaciones solamente se sale con unión y solidaridad.

Unión que lleva dos años mostrando la ciudad de Toro, contenida en su crecimiento por estas causas inesperadas, pero dando ejemplo continuamente de superación y valentía, avanzando con paso firme hacia un futuro lleno de posibilidades y esperanza. Un futuro que debe venir de la mano de fórmulas hacia el medio rural que llevamos demandando durante décadas a las administraciones superiores y que hoy en día son más necesarias que nunca. Fórmulas que repartan mejor nuestro país, extremadamente centralizado y desequilibrado poblacionalmente, y fórmulas que permitan que cualquier ciudadano tenga acceso a servicios de calidad independientemente de donde haya decidido desarrollar su proyecto de vida.

Y en la búsqueda de esas fórmulas vamos aprendiendo, y hasta de esta dichosa pandemia, se sacan lecturas positivas. La lectura de que es posible vivir en zonas rurales, con más calidad de vida, con más tranquilidad y con todas las posibilidades que garanticen una vida plena. 

Es Toro, sin duda, un maravilloso lugar para desarrollar ese proyecto en plenitud debido a su situación, a su cercanía a otros lugares, debido a la naturaleza y el entorno que lo rodea, debido a su tejido productivo y sus infraestructuras de comunicación. Y debido a la vitalidad y hospitalidad de sus vecinos y vecinas.

Un turista fotografía la Puerta de la Majestad en la Colegiata de Toro María Jesus Cachazo

Hospitalidad que la ciudad está deseando mostrar hacia uno de los proyectos que más ilusionan a la ciudad, a su comarca y a toda la provincia de Zamora: la vuelta de los militares al campamento de Monte la Reina. Sin duda, una de las vías de futuro más urgente y por la que pedimos celeridad a las administraciones competentes de ponerlo en marcha. Las noticias son esperanzadoras, no cabe duda, pero es cierto, que los pasos que se están dando desde el Gobierno Central, no son lo suficientemente firmes como para que aún estemos convencidos de su realización. Cabe acelerar esta cuestión, porque va a traer desarrollo y riqueza a nuestra ciudad, pero por encima de todo, va a venir con el capital más necesario actualmente: el humano. Necesitamos personas que vengan y descubran la calidad de vida que tienen nuestras calles y alrededores. Necesitamos este proyecto para un futuro esperanzador, porque apuntalaría además nuestras demás virtudes.

La virtud de un tejido empresarial y comercial firme y asentado, envidiado en muchos lugares por la cantidad y la calidad de nuestras empresas y comercios. Innovadores y emprendedores que cada día apuestan por Toro y su tierra, por sus gentes, y que consiguen el reconocimiento de propios y ajenos a cada paso que dan. 

Junto a la vuelta de los militares, tenemos más esperanzas, unas en camino y otras caminando. En camino proyectos que se van aponer en marcha con los Fondos de Resiliencia procedentes de la Unión Europea y en los que Toro se está posicionando de manera sobresaliente, y entre los que cabe destacar la creación del Espacio 602, ese corredor agroalimentario que une las provincias de Zamora, Valladolid y Segovia bajo la máxima de que la unión es la virtud para ser pioneros, y hacerlo en el sector donde somos los mejores, el sector que depende de nuestro mayor tesoro, nuestros campos y lo que producen. 

Pero también esperanzas que ya caminan, como el posicionamiento turístico, como una de las fuentes más importantes de generación de riqueza, trabajo y desarrollo. Toro se ha posicionado como referente a nivel nacional debido a su patrimonio, tradiciones y festejos y a su gastronomía. Quien viene a visitarnos marcha con la obligatoriedad autoimpuesta de volver, y lo mejor, es que, efectivamente, vuelven. Para ello, Toro ha puesto en marcha la Estrategia de Sostenibilidad Turística en Destinos del Ministerio de Industria y que puede suponer una verdadera revolución para nosotros. Estamos preparados y trabajando intensamente para ello.

Son mimbres que hacen una cesta que contiene futuro, y esos mimbres parten de una ciudad y una ciudadanía llena de vitalidad y energía, que está preparada para enseñar su ciudad al resto y convencerles de las posibilidades que aquí existen. Una ciudad bonita, tranquila, con alternativa de ocio, deportiva y cultural que es la envidia de muchos lugares. Una ciudad musical que suena cada día del año dando oportunidad al acceso universal a la cultura a todos sus habitantes, y haciendo de ello también un reclamo para aquellos que quieren visitarnos. 

En definitiva, una ciudad de posibilidades infinitas, deseosa de avanzar y preparada para ello. Os invitamos a Toro, y os aseguro que nuestra querida ciudad os cautivará en todos los sentidos. El futuro es nuestro y llegar a él está en nuestras manos.