“Nuestra evolución ha ido acorde siempre a las necesidades de nuestros socios y a la coyuntura económica y social que nos rodea, a la que no somos ajenos”.

Nunca me he considerado un nostálgico, pero es inevitable sentir una emoción especial al recordar el pasado, y especialmente los primeros encuentros de un puñado de hombres del campo que soñábamos grande. Solo de este modo, soñando en grande, conseguimos, gracias al apoyo de muchas personas, hacernos un hueco en un sector dominado por las grandes compañías. Pese a las complicaciones iniciales, la ilusión y compromiso de los 380 fundadores pudo con todo. Un compromiso insólito, apostando lo que se tenía y también lo que no, avalando las deudas de una cooperativa en ciernes que, hasta ese momento, no tenía un futuro claro. Los agentes de Extensión Agraria si vislumbraron el futuro de la cooperativa, y por ello se mostraron incansables en transmitir la importancia de la cooperación en nuestra provincia. Esta idea caló en los fundadores en una Zamora en la que el sector del porcino era líder y referencia nacional en la cría de lechones. 

Hemos apostado por el cooperativismo en el que seguimos creyendo firmemente basado en la misión desde el origen: generar prosperidad ayudando a nuestros agricultores y ganaderos

En ese contexto arranca Cobadu, un 2 de mayo de 1982 con tan solo seis empleados, a los que desde esta página doy mi enhorabuena por creer en el proyecto. Un arranque y recorrido posibilitado también por Caja Rural, compañeros de viaje desde nuestro origen. Nuestra evolución ha ido acorde siempre a las necesidades de nuestros socios y a la coyuntura económica y social que nos rodea, y a la que no somos ajenos. Nuestra cooperativa, hoy en día el mayor colectivo de agricultores y ganaderos de toda España, ha llegado hasta aquí pasando por momentos complicados, recientes y más lejanos, pero todos ellos con un trasfondo de aprendizaje que nos ha impulsado a seguir creciendo. Asumimos en la década de los 80, que Cobadu tenía que crecer, y eso solo era posible con la incorporación de más socios, además de los fundadores. Pero eso solo se consiguió con la generosidad del Consejo Rector, una cualidad indivisible de los representantes de los socios, que año tras año han ido dando lecciones de sentido común y honradez, con Florentino Mangas como presidente desde 1984, y por ello es obligatorio reconocer su labor. 

En este camino como director general, he tenido a mi alrededor colaboradores excepcionales y comprometidos que han hecho de Cobadu una empresa cooperativa completamente profesionalizada y referente. Nuestro colectivo es fruto de la simbiosis entre socios y empleados, una relación basada en la confianza, y por sentirnos todo en el mismo barco, remando juntos para conseguir que sigamos hacia adelante. 

Proyecto de modernización de Cobadu

Desde el Bajo Duero, hemos apostado por el cooperativismo en el que seguimos creyendo firmemente hoy en día, basado en la misión desde el origen: generar prosperidad ayudando a nuestros agricultores y ganaderos.Hemos llegado hasta aquí con mucho esfuerzo, y ahora podemos estar orgullosos de lo que hemos conseguido, una cooperativa sólida, afianzada en nuestra tierra y que ha generado riqueza en su entorno. El perfil actual del profesional del sector primario ha cambiado mucho en los últimos años, ahora el ganadero requiere otros servicios hacia los que las cooperativas y el resto de entidades que operamos en el medio rural debemos orientarnos. 

Cobadu es cada día más flexible a sus socios y con una mayor capacidad de adaptación, base para encofrar nuestro devenir. Fruto de esta adaptación es nuestro área de actuación actual, que ya ha superado los límites no solo de Zamora, sino también de Castilla y León, pues tenemos actividad en todas las zonas limítrofes, incluido Portugal. Y también es consecuencia la dimensión de la cooperativa, condicionada por la diversificación, obligatoria ante las necesidades de nuestros socios. Hemos pasado de producir 8 millones de kilos de pienso en todo un año, a fabricar esa misma cantidad en solo tres días en la actualidad. Este es el reflejo de nuestra evolución, y confío en que este 40 aniversario sea un merecido homenaje a todos los que, desde el comienzo, creyeron en Cobadu, y un acicate para seguir creciendo. 

Nos encontramos en un 2022 lleno de retos que afrontar como cooperativa, aportando al sector nuestra humilde esperanza y rescatando el espíritu de nuestros fundadores para que la agricultura y ganadería en nuestra provincia siga siendo sostenible.