El Correo de Zamora nació en 1897, el año que los españoles lamentaron el asesinato del presidente Cánovas, abatido por los disparos del anarquista italiano Michele Angiolillo. Meses después, esa España en decadencia que necesitaba regeneración y solo presagiaba malos augurios veía cómo su flota caía derrotada con estrépito ante la norteamericana en Cuba, en una onda expansiva que supuso de facto el ocaso de todo un imperio.

El periódico vio la luz el mismo año que se descubrió la Dama de Elche, se estrenó el Cyrano de Bergerac de Edmond Rostand en París y La Revoltosa de Ruperto Chapí en el Teatro Apolo de Madrid. Desde entonces la información de El Correo de Zamora -actualmente La Opinión-El Correo de Zamora- ha acompañado a generaciones de zamoranos de tres siglos diferentes con vocación de liderazgo en el territorio y con la abnegación propia de una cabecera plenamente identificada con la personalidad y las inquietudes de los ciudadanos de esta tierra.

La efeméride del 125 aniversario de La Opinión-El Correo de Zamora es motivo de satisfacción para Prensa Ibérica, un grupo editorial con 25 periódicos en toda España que ha hecho de la información local y regional su principal bandera. Permanecer durante tantos años en el imaginario colectivo de un pueblo solo es posible desde la complicidad hacia los lectores, la pasión por un periodismo capaz de defender sus anhelos, el compromiso con la verdad y la capacidad de adaptación a cada nuevo tiempo.

Desde la experiencia que aporta su reseñable longevidad, La Opinión-El Correo de Zamora, apoyada por su grupo matriz, mira al futuro con la firme voluntad de ayudar a la sociedad zamorana a avanzar hacia un horizonte de mejores oportunidades

A lo largo de 125 años cambian las circunstancias, cambian los hábitos y cambian las expectativas y necesidades de la sociedad, por lo que solo sobreviven los diarios que realmente demuestran un espíritu permanente de renovación y modernización.

La Opinión-El Correo de Zamora es el resultado de una fusión en los años 90 que garantizó a los zamoranos la continuidad de su histórica cabecera y un decidido avance hacia el progreso desde la independencia y la pluralidad informativas.

En 1990, bajo el impulso de Prensa Ibérica, vio la luz La Opinión de Zamora, un nuevo periódico dotado de las últimas tecnologías en producción e impresión que, combinando la experiencia de profesionales veteranos y el empuje de un nutrido equipo de periodistas jóvenes e inquietos, supo imprimir un nuevo aire a la información local de la provincia.

El Correo, adscrito a los Medios de Comunicación Social del Estado, había sido adquirido en la década de 1980 por un grupo de empresarios en una segunda subasta del periódico tras quedar desierta la primera. La fragilidad del proyecto, la presión de las deudas, su creciente descrédito hacia la opinión pública y la caída en ventas, unidos al ascenso de La Opinión de Zamora, marcaron el destino del antiguo rotativo.

La adquisición de El Correo por Prensa Ibérica dio cauce a su legado histórico, aseguró su supervivencia, reafirmó sus señas zamoranas de identidad y aportó a la cabecera la viabilidad necesaria para afrontar importantes retos de futuro. En 1993 se formalizó la unión de ambas cabeceras. Desde entonces, La Opinión-El Correo de Zamora ha consolidado su posición de vanguardia entre los medios de comunicación de la provincia y se ha convertido en un diario de referencia en Castilla y León.

El viejo periódico del siglo XIX, que es capaz hoy de facilitar información contrastada e inmediata en distintas plataformas y ejerce una notable influencia social, es líder en Zamora tanto en papel como en digital, soporte en el que acumuló en el último año casi once millones de usuarios únicos y más de 62 millones de páginas vistas.

El peso de la información de proximidad en las páginas del diario, junto al esfuerzo constante por cubrir los acontecimientos más relevantes dentro y fuera de la provincia con el apoyo del grupo al que pertenece, afianzan un proyecto periodístico que, en su aniversario, echa la vista atrás pero, sobre todo, se proyecta hacia el futuro con la determinación que requiere un territorio con importantes desafíos.

En una tierra en la que la despoblación se ha convertido en una de las principales preocupaciones en la agenda política y social, llama la atención la fidelidad que demuestran no solo los lectores que permanecen en la provincia sino también los que se han marchado. Los emigrantes zamoranos, incluso en tercera o cuarta generación, siguen vinculados a su tierra a través de la conexión que facilita La Opinión-El Correo de Zamora, cuya edición digital llega a todos los rincones del mundo.

La relevancia social de la cabecera es directamente proporcional a su interés por las cuestiones que preocupan a los zamoranos. La organización del I Congreso de Despoblación “Razones para quedarnos” es buena muestra de ello. Lo son también las numerosas actividades que, desde hace 30 años, organiza su Club de prensa en favor de los grandes debates públicos, la cultura, el deporte y causas sociales como la integración o la igualdad de género.

Desde la experiencia y el conocimiento que aporta su reseñable longevidad, La Opinión-El Correo de Zamora, apoyada por su grupo matriz, mira al futuro con la firme voluntad de redoblar sus esfuerzos para ayudar a la sociedad zamorana a avanzar hacia un horizonte de mejores oportunidades.

Su amor por esta tierra y su identificación con la ciudadanía de Zamora impulsan a los profesionales de este periódico a seguir trabajando en la convicción de que la información de calidad es siempre aval de libertad.

Espero que la lectura de este suplemento especial por el 125 aniversario del periódico sea de su interés.