Conseguir una partida de nacimiento que demuestre que su padre o su madre nacieron en Zamora, y lograr así, por ejemplo, la ansiada nacionalidad, va a ser ahora más sencillo para los miles de emigrantes zamoranos dispersos por el mundo.

La Diputación pone en marcha un nuevo servicio dedicado precisamente a gestionar las solicitudes de estos documentos que a partir de ahora lleguen a la institución. El diputado responsable del área de Emigración, José Luis Bermúdez, ha impulsado esta medida para ayudar a todos los emigrantes zamoranos y sus descendientes en una tarea que en ocasiones resulta muy difícil por la distancia y por los escasos datos que se manejan.

Las personas que necesiten una partida de nacimiento o defunción deben ponerse en contacto con la Diputación Provincial y realizar la correspondiente solicitud a través del correo electrónico de la institución (www.diputaciondezamora.es) o por correo postal (Diputación Provincial de Zamora, Plaza de Viriato, 49001, Zamora, España). Todas estas peticiones se canalizarán al departamento de Emigración, desde donde se gestionará la expedición del documento y su posterior remisión al destinatario.

Con el nuevo servicio de tramitación de partidas de nacimiento la Diputación da respuesta a uno de los principales problemas burocráticos que tienen que solventar los emigrantes y sus descendientes, y que hasta ahora sólo era posible gracias al goteo de ayudas prestadas por los secretarios y alcaldes de los ayuntamientos cuando les hacían llegar las peticiones de forma directa, al igual que ocurría con la propia Diputación Provincial.

Por su parte el presidente de la Diputación, Fernando Martínez Maíllo, aprovechó ayer la recepción a los 14 integrantes de la "Operación Añoranza" para subrayar ante todos ellos que tiene intención de viajar a Cuba y Argentina a visitar a los zamoranos que residen allí, «porque también es mi obligación atenderles, y lo haré aunque luego digan que he estado allí cuando no lo he hecho», añadió en relación a la denuncia del PSOE sobre un viaje que finalmente no existió. Maíllo aboga por mantener el «alto consenso» que considera ha existido siempre en torno a la "Operación Añoranza", porque «la oposición ha ido allí y sabe de la importancia de la ayuda que se les presta».