La Consejería de Fomento pretende que el año 2018 marque un antes y un después en la inversión para la conservación y mejora de carreteras. En los primeros treinta días del año han visto la luz varios procesos de adjudicación que se traducen en una inversión que en Zamora supera los cinco millones de euros, según la información suministrada por Ical. Se trata, indican desde la Consejería, de garantizar el buen estado de la red regional, una de las más extensas del país.

Entre las actuaciones destacadas en Zamora están los 2,5 millones para la intervención en la CL-527, la ZA-633 y la CL-612. También se actuará, entre las inversiones más importantes, en la ZA-101 entre Zamora y Galicia.

En términos regionales la inversión supera los cien millones de euros para la conservación de carreteras. En los primeros 130 días del año ya han visto la luz 30 contratos a través de la licitación y la apertura del proceso de adjudicación de obras y servicios para garantizar el buen estado de la red autonómica.

El volumen inversor de Fomento permite a la Consejería que dirige Juan Carlos Suárez-Quiñones recuperar el grado de ejecución del Bloque de Actuaciones Prioritarias, que aprobó en enero de 2016, para que las carreteras estuvieran de nuevo "en forma" en esta legislatura. A un año de que expire el mandato, con la celebración de la nuevas elecciones autonómicas, la Consejería roza los 200 millones licitados, lo que supone prácticamente la mitad del total del plan.

De hecho, la actividad de la Dirección General de Carreteras e Infraestructuras alcanza este año un ritmo no visto desde la etapa de bonanza económica, en la que los presupuestos dedicaban un gran volumen de recursos a este capítulo. Ahora, pese a las estrecheces, Fomento está decidido a dar un "empujón" sin precedentes a su plan de carreteras, tras el parón que sufrió en 2017, para lo que la maquinaria de contratación no se detiene.

En concreto entre enero y principios de mayo, periodo que comprendió la celebración de la Semana Santa y otros festivos, Fomento sacó a concurso 101 millones, lo que supone unos 800.000 euros diarios, en 30 contratos. De ellos, adjudicó seis expedientes por un montante de 4,63 millones y busca contratista que ejecute otros 24, lo que augura un año récord para las carreteras autonómicas.

La mayoría de las licitaciones -23- corresponden a diversas actuaciones sobre firmes y seguridad vial, con presupuestos que oscilan entre los 4,7 millones y los 300.000 euros. A ellos se une un "macrocontrato" de 49,47 millones, dividido en cinco lotes, para la ejecución de diversas operaciones de conservación en las carreteras y tramos de la red autonómica en las provincias de Burgos (norte), León (este), Salamanca, Segovia y Zamora.

Los técnicos de la Consejería examinan las ofertas presentadas para cada uno de los lotes de este expediente, con el fin de adjudicar su ejecución durante 48 meses -cuatro años-. Las obras que se van a realizar incluyen servicios de vigilancia y de comunicaciones, atención a accidentes e incidencias, servicios de vialidad invernal y estudios de accidentalidad, entre otros.

La Consejería de Fomento mantiene como prioridad la conservación y mantenimiento de la extensa red autonómica y así se contempla en los presupuestos de 2018, donde se recoge un partida de 92,17 millones de euros, lo que supone un incremento de un 36% con respecto a 2017.