El proyecto de ensanche del paso bajo la vía del antiguo tren Ruta de la Plata, en la calle de Cañizal, en pleno barrio de Pinilla, prevé un incremento de la longitud de la calzada desde los seis metros actuales hasta los 20 que existirán después de las obras. Una actuación que pretende dar cobertura y seguridad a los más de 11.000 vehículos que cada día transitan por esta carretera CL-605 que da acceso a la ciudad de Zamora. Se da la circunstancia, además, de que los únicos pueblos que han crecido en la provincia en los últimos años utilizan este nudo para entrar y salir de la capital; pueblos tales como Morales del Vino, Villaralbo o Moraleja del Vino, a lo que hay que añadir el tráfico de camiones de las diferentes industrias y naves que existen en este enclave. Una "necesidad de la seguridad vial", indican desde el Ayuntamiento de Zamora, que se ejecutará a la mayor brevedad posible.

Francisco Guarido , alcalde de Zamora, y Antidio Fagúndez, teniente de Alcalde, presentaron en la jornada de ayer el proyecto de ampliación del paso inferior de la calle de Cañizal. Una obra presupuestada en 200.000 euros y que deberá pasar por licitación y adjudicación antes del inicio de los trabajos. "Una obra que ejecutaremos con fondos propios ante la negativa tanto del Ministerio de Fomento como de Adif, propietaria de la vía del ferrocarril, que aún así han dado visto bueno al proyecto y facilitarán la acometida de los trabajos", señaló el edil del PSOE, Antidio Fagúndez. A lo que apostilló el regidor de IU, Guarido: "No se trata de echar culpas a otras administraciones como algunos dicen, cosa que no hacemos; se trata de explicar lo que ha ocurrido".

La parte más importante del proyecto de ampliación se encuentra en la anchura total que quedará al final del proceso y que pasará de los poco más de seis metros actuales a los 20 metros, aceras incluidas. "Con este trabajo, el paso va a quedar muy desahogado y seguro tanto para los vehículos como para los peatones que también transitan por esta zona", indicó Francisco Guarido. El plazo de ejecución de las obras será de tres meses desde que se produzca la adjudicación definitiva, por lo que los vecinos del barrio representados por Artemio Pérez han pedido la máxima celeridad posible ante una situación que consideran prioritaria. El alcalde, por su parte, se mostró satisfecho por "dar solución a un problema de seguridad vial en una de las salidas de la ciudad más concurrida". Fagúndez, además, añadió que el equipo de Gobierno IU-PSOE "ha cumplido el compromiso adquirido con los vecinos de Pinilla que tantos años llevaban reclamando".