"Queremos demostrar que las escuelas son algo más que lugares para el estudio, que se pueden utilizar como espacios para realizar diversas actividades". Así explicaba hace unos días Marina Álvarez, presidenta de Confapacal -la confederación que aglutina las ampas de la escuela pública de Castilla y León- la jornada que ayer tuvo como escenario el colegio Sancho II. Bajo el lema "Otro modelo educativo y social es posible", los miembros del ampa de este centro volvieron a organizar una semana solidaria que culminó con los actos del sábado, abiertos a toda la comunidad educativa de la ciudad.

El objetivo era doble: por un lado lúdico, a través de todas las actividades que se habían programado para los más pequeños; y por otro solidario, puesto que los participantes aportaban como entrada simbólica material escolar, libros o productos higiénicos para bebés, que tendrán como destino algunas organizaciones de la capital, como Cruz Roja y Zamora con el Sáhara.

Precisamente trabajadores y voluntarios de ambas ONG estuvieron echando una mano a los padres durante toda esta jornada festiva, participando también con sus propias propuestas, como la tradicional jaima. En esta edición los padres también tuvieron actividades para ellos, como la sesión vermut, que contó con actuaciones musicales para amenizar la velada.

Esta jornada, organizada por la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos de Zamora (FAPA) y el propio ampa del Sancho II, fue el colofón de toda una semana con actividades solidarias en el colegio para todas las edades, desde los cuentacuentos para los más pequeños con el objetivo de inculcarles valores hasta la donación de sangre para los padres, en la que hubo gran participación.