Artur Nunes, alcalde de Miranda do Douro, fue otro de los representantes presentes en este seminario sobre políticas inteligentes y sostenibles y mejora de la gestión del patrimonio transfronterizo celebrado ayer en la ciudad de Zamora. El regidor mirandés insistió en la necesidad de conectar es "L" entre Zamora-Puebla-Braganza y fue más allá en materia de infraestructuras. "Vemos cómo ahora mismo es necesario ir hasta Salamanca para poder conectarse tanto al tren de alta velocidad como para ir desde España hasta Oporto. Y sería interesante que Zamora también pudiera ofrecer esa conexión que serviría tanto a españoles como a portugueses para estar aún más cerca, al igual que para atraer un mayor volumen de turistas", expuso.

En este sentido, Nunes se refirió al territorio zamorano y trasmontano como una posible entrada europea a Portugal. "Actualmente existen dos puntos importantísimos de entrada, que son Lisboa y Oporto. Pero nosotros tenemos potencialidades suficientes para que la frontera con Zamora se convierta también en ese tercer punto de entrada que, sin duda, es necesario", añadió.

La reunión celebrada ayer en la capital contó con la participación de representantes de ocho regiones fronterizas europeas que participan en el proyecto EPICCAH: la AIMRD (España), TOKAJ (Eslovaquia-Hungría), ASEV (Italia-Francia), RWM (Grecia, fronteras exteriores), Peipsi (Eurorregión Estonia-Lituania), Pilsen (Alemania-República Checa), Satu Mare (Rumanía-Hungría) y Eixo Atlántico (Eurorregión Galicia-Norte de Portugal). Todas ellas aprobaron el informe que una comisión de expertos internacionales ha elaborado para este proyecto sobre la situación y potencialidades del turismo de frontera. Un informe que se entregará a la Comisión Europea antes de verano y que recoge un conjunto de recomendaciones sobre la inclusión de políticas de turismo en los objetivos y prioridades de financiación de los Fondos Estructurales.