Aprovechan cualquier festividad, desde San Valentín hasta Carnaval, para integrar en el habitual horario de las clases lectivas otras actividades que fomenten el aprendizaje en valores. Desde el IES Alfonso IX su equipo docente organiza diferentes talleres y encuentros con este objetivo, que completa la educación reglada durante todo el curso.

Desde el inicio del año, tanto alumnos como profesores han desarrollado una serie de actividades centradas en la amistad y el amor, para, finalmente, concluir con la fiesta principal de San Valentín. Fue ahí donde tres alumnas, convenientemente disfrazadas de Cupido, se dedicaron a repartir a los destinatarios los mensajes que se habían introducido en los denominados "buzones del amor y la amistad", repartidos por el centro. "El proyecto no habría sido posible sin el apoyo constante de todos, desde el equipo directivo hasta el profesorado, alumnos y personal laboral", aseguran.

También hay una mirada al exterior, como lo demuestra la actividad que se desarrolló con motivo del Día Mundial de la Paz. En esa ocasión, el centro organizó la tercera edición de la Carrera Solidaria a favor de la Asociación Zamora con el Sáhara. "En ese día se aprovechó para concienciar a los alumnos en las tutorías y también acudieron al centro miembros de la asociación para promover la acogida de niños saharauis en Zamora mediante el programa de Vacaciones en paz durante los meses de julio y agosto", apuntan desde el centro.

El IES Alfonso IX también colabora con la Fundación Ser en la recogida de tapones de plástico, cuya recaudación ayuda en gran medida a financiar tratamientos médicos a pacientes menores con enfermedades raras. "Este curso, el centro también ha participado con Manos Unidas en la tradicional iniciativa del Bocata Solidario y con Cáritas en la campaña de recogida de ropa", añaden los profesores.

Desde la residencia

No solo se incluye a los alumnos del instituto en este tipo de actividades, sino que también es habitual organizar iniciativas solidarias centradas en aquellos estudiantes que viven en la residencia del centro durante toda la semana. Precisamente, y coincidiendo con la festividad de San Valentín, los residentes se afanaron en vender piruletas en forma de corazón para recaudar fondos. En esta ocasión, el destino del dinero era para colaborar con la Asociación de Padres, Familiares y Amigos de Niños Oncológicos de Castilla y León.