Emulando al gran aventurero Willy Fog o buscando sin descanso a Wally. Así han aprendido estas últimas semanas geografía los alumnos del colegio María Inmaculadacolegio María Inmaculada, vinculado a la metodología de la Fundación Trilema, basada en proyecto, desde este mismo curso.

Cada final de proyecto conlleva lo que se denomina "celebración del aprendizaje", donde se realiza una jornada de puertas abiertas para padres y familiares. Ahí los niños se convierten en protagonistas absolutos, pues son los encargados de explicar a sus progenitores todo lo que han aprendido. Así, los más pequeños detallaron los secretos del espacio, con las constelaciones, los planetas y las estrellas, mientras que los alumnos de Primaria se centraron en el reciclaje y los problemas de la contaminación, además de aprenderse las comunidades de España o las ciudades de Europa, todo con una metodología muy amena.

Los alumnos del ciclo formativo de grado medio de auxiliar de enfermería se unieron en esta ocasión al proyecto y fueron los encargados de engalanar la entrada del colegio como si se tratara del acceso a un gran transatlántico. De hecho, habían desarrollado su aprendizaje estas semanas embarcándose en un crucero, para aprender de una manera diferente desde alimentación hasta primeros auxilios.

Después de medio curso con la metodología desarrollada por la Fundación Trilema, basada en proyectos, desde la dirección Marta Martín reconoce que esta nueva forma de estudio se han notado mucho los cambios en aspectos tan palpables como la expresión oral de los alumnos, "algo que se ha comprobado en cada una de las celebraciones del aprendizaje que hemos ido haciendo", asegura.

Una mejora que se aprovecha también en las últimas jornadas de puertas abiertas a los padres que quieren conocer el centro ante la posibilidad de matricular a sus hijos de cara al próximo curso 2018-2019. "Yo misma me he quedado sorprendida de cómo los niños se dirigen a personas que no conocen y les explican cómo es el colegio", confiesa la directora. "Aparte de la expresión, está el tipo de vocabulario que utilizan", añade.

Otros cambios se han observado también en la disciplina, "sobre todo en la etapa de Secundaria, al tiempo que han mejorado a la hora de trabajar en equipo. El trabajo colaborativo ha ayudado a estos cambios tan beneficiosos", apunta Martín. De hecho, asegura que los alumnos de los ciclos superiores valoran especialmente el trabajo por proyectos por la libertad que les aporta a la hora de aprender.

"Mi valoración hasta la fecha es muy positiva, no solo por los alumnos, sino también en lo que respecta al profesorado, porque está trabajando mucho, con formación intensiva cada semana para dar ese cambio que estamos desarrollando en las aulas", subraya para finalizar.