Más de trescientas firmas fueron entregadas ayer en las Cortes de Castilla y León por la plataforma "SOS Artes Escénicas" para denunciar la "gravísima e insostenible" situación que atraviesa el sector en la comunidad.

Coincidiendo con el Día Mundial del Teatro, los profesionales del gremio quisieron denunciar la "situación límite" que viven a día de hoy y que, a su juicio, pone en serio peligro su continuidad. "No existe voluntad política más allá de buenas palabras y sonrisas, se confunde cortoplacismo con política cultural (...) y se ningunea y desprecia a los artistas y creadores castellanoleoneses"", arguyen. En este sentido, según apuntan desde el movimiento, los recursos públicos para las artes escénicas han sufrido recortes en torno al 70% en la última década y los teatros de Castilla y León han perdido en los últimos años el 50% de sus espectadores. Unos guarismos que han llevado a la "destrucción de decenas de puestos de trabajo, que han dejado en la más absoluta precariedad a los profesionales que aún resisten y que han impulsado la huida de nuestros jóvenes talentos", además de facilitar el intrusismo laboral.

De hecho, tal y como apunta Moncho Enríquez, de Baychimo Teatro, la reciente desaparición de la Unión de Actores de Castilla y León es un claro síntoma de que las empresas de la región dedicadas a las artes escénicas "han desaparecido" y las que resisten lo hacen, a su parecer, en régimen de "autoexplotación". El hecho de que el foco de atención institucional siga siendo desviado del mundo de la cultura ha provocado el hartazgo entre los profesionales, quienes defienden constituir un "sector económico sostenible y rentable" y contribuir a la "vertebración social y al fortalecimiento de la identidad de Castilla y León".

"Nuestra comunidad es tierra de artistas que merecen unas políticas culturales decididas e inmediatas (...) Seguimos vivos aunque no sepamos por cuánto tiempo", señalan en un comunicado.