La accesibilidad del turista a los diferentes monumentos que ha de visitar en la ciudad se ha convertido en una necesidad para poder ofrecer un servicio de calidad y abierto a todo el mundo. Zamora, en este sentido, cumple con prácticamente todos los requisitos exigibles, aunque aún mantiene dos asignaturas pendientes. Un par de lugares que, precisamente, son dos de los emblemas del Casco Histórico y de la propia capital: el salón de los tapices del Museo Catedralicio (inspiración para diferentes series de TVE y las zonas altas del Castillo. El problema, en ambos espacios, es que la propia configuración de los edificios impide salvar las barreras arquitectónicas, por lo que no existirá, a corto plazo, una solución para ninguno de los lugares.

La Asociación Zamorana de Guías Turísticos, que celebra este próximo domingo el Día Internacional de la profesión con una visita solidaria, ha insistido en la necesidad de mejorar los servicios ofrecidos para sacar todo el potencial posible al turismo zamorano. "Tenemos que prestar mucha atención a la accesibilidad y sostenibilidad del turismo, al margen de la lucha contra la intrusión laboral que al final termina perjudicando a ofrecer un servicio de calidad", señala Eva Jiménez. En materia de accesibilidad, aseguran desde la asociación, Zamora tiene un "aprobado alto" tanto en iglesias como en la propia calle, donde el "pasillo de granito" de las rúas del Casco Histórico es aplaudido por quien tiene movilidad reducida.

Los guías turísticos asociados reivindican este próximo domingo su trabajo "de calidad" con una visita por el itinerario "Zamora Románica" cuyo coste, de ocho euros, irá destinado íntegramente a la Asociación de Enfermedades Raras "Corriendo con el corazón por Hugo".