Un proyecto en el que se ha involucrado todo el barrio, más allá de la comunidad educativa del colegio Santísima Trinidad. La iniciativa "Aprende, participa y dona", el proyecto de aprendizaje que ha tenido una duración de doce semanas, finalizaba ayer por todo lo alto con una jornada maratoniana de donaciones de sangre que fue posible no solo gracias al empeño de profesores y alumnos del centro del Amor de Dios, sino también a la colaboración desinteresada de la Hermandad de Donantes de Sangre de Zamora, la asociación de vecinos El Puentico de Pinilla y la Asociación de Comerciantes de la Margen Izquierda del Duero (Acmid). El éxito de la convocatoria ya hacía presagiar a primera hora de la tarde que se iban a superar las cincuenta donaciones que se habían marcado como meta desde el colegio, con el objetivo final de convertir al barrio de Pinilla "en una referencia ciudadana en el ámbito de la donación de sangre", explicó el director del centro, Luis de Mena.

Detrás de este colofón de lujo hay un intenso trabajo por parte de los alumnos de 5º y 6º de Primaria y 3º y 4º de la ESO, quienes en las últimas jornadas habían salido a la calle para animar a los vecinos a la participación "después de haber recibido una charla por parte del presidente de la hermandad de sangre. Sabíamos que los donantes tienen que tener más de 18 años, pesar más de 50 kilos y estar en buena condición física", enumeró Triana Pino, estudiante de 6º de Primaria, mientras que su compañero, Pablo Fernández, explicó que "los donantes deben estar unos cinco minutos en la camilla, para extraerles medio litro de sangre. La más solicitada ahora es 0 negativo". Para este alumno, esta forma de aprender es muy interesante. "Jugando siempre se aprende más en clase", valoró sobre esta manera de trabajar en el aula.

Durante estos últimos meses se han unido los docentes de materias como ciencias, lengua o matemáticas para elaborar este proyecto, que ha sido elaborado junto con los miembros de la asociación de padres. "Los objetivos pasan por sensibilizar, investigar y luego evaluar", resumió de Mena. Así, tras aprender todo sobre las donaciones de sangre -desde los tipos que existen hasta la compatibilidad y su función- se inició un proceso de indagación donde el interés de los alumnos es el motor principal. Tras la jornada de ayer, finalizará el proyecto con el análisis de todos los datos obtenidos.

Luis de Mena apuntó que el centro lleva dos años apostando por la educación por proyectos, una forma "más que interesante de aprender, donde es el propio alumno quien descubre nuevos conocimientos y se interesan más en las materias", subrayó. De esta manera, consideró que la evaluación final tras cada proyecto "es más coherente y transparente".

El colegio Santísima Trinidad de Pinilla comenzará en breve otro nuevo proyecto con el Duero como protagonista.