Aunque el sorteo del coche que este año impulsó la Asociación Zamorana de Empresarios del Comercio -Azeco- haya animado las compras navideñas, lo cierto es que el sector ha dicho adiós al mes de más actividad del año sin grandes alegrías. El consumo ha aumentado con respecto a meses anteriores, algo evidente, pero las ventas han sido similares a las del año pasado, un ejercicio que "no fue bueno". Pese a todo, los comerciantes de Zamora confían en que la campaña haya calado y que tenga "sus efectos para reforzar la imagen del sector entre la sociedad zamorana. Este papel lo ha cumplido sobradamente", apunta Ángel Hernández, secretario general de la patronal del comercio.

"En resumen, estamos hablando de una campaña de Navidad que ha sido muy semejante a la del año anterior", algo que va contra las previsiones que el propio sector realizaba a comienzos del mes de enero -cuando se estimaba un leve crecimiento del consumo en la provincia-. Con estos mimbres no es raro que la campaña de rebajas, que comenzó oficialmente después de Reyes, comience a andar con unas expectativas "flojas". Las ventas que se registren serán, en cualquier caso, muy semejantes a las del año anterior. Los primeros días de la campaña de promociones, con clientes en las tiendas pero sin atisbo de las aglomeraciones de años pasados, demuestran que las ventas no acaban de repuntar. Si el panorama es este a pocos días del comienzo de la temporada de rebajas, difícilmente se podrá mejorar con el avance de las semanas pese a los "agresivos" descuentos del sector.

Los factores que, a juicio de Azeco, explican esta situación son varios. "Algunos afectan solo a Zamora y otros a todo el territorio nacional", razona Ángel Hernández, "pero estamos hablando de situaciones como la cada vez mayor fortaleza del comercio por Internet, una competencia fuerte y creciente que resta clientes al comercio tradicional". Los comerciantes zamoranos también señalan a los cambios en los hábitos de consumo que llevan a los compradores a "comercios verticales, como las grandes superficies", donde se pueden encontrar productos de varios sectores en un mismo lugar, así como "al cambio de hábitos que ha traído la crisis económica" ya que "los compradores ahora buscan más el ahorro y las promociones que hace unos años".

Si se analiza exclusivamente la provincia de Zamora "podemos ver un factor diferenciador en lo que afecta al consumo, y es que las economías domésticas de la provincia, que son las que nutren la demanda interna que registran las empresas que están aquí establecidas, son débiles". Se trata, analiza Ángel Hernández, "de una situación bastante negativa que afecta a las ventas". Esto, en una provincia como Zamora donde el peso del sector comercial es muy elevado dentro del tejido económico, "es esencial" para explicar la situación general. "Se genera una espiral que hace que la economía no crezca", apunta el secretario general de la Asociación Zamorana de Empresarios del Comercio.