Las negociaciones entre equipo de Gobierno, el grupo municipal de Ciudadanos y la concejala no adscrita Cruz Lucas han permitido desbloquear el presupuesto municipal de este año apenas dos semanas después de que las cuentas recibieran el "no" del Pleno. Finalmente, ambas partes han cedido y se ha llegado a un acuerdo. Ni Ciudadanos ha tenido tantas "líneas rojas" como se auguraban ni Guarido cumplió aquello de presentar en Pleno las mismas cuentas que se rechazaron el 22 de diciembre.

El acuerdo, formalizado ayer en un ambiente de forzada cordialidad, tiene un impacto económico de 1,23 millones de euros en las cuentas municipales, cantidad que se repartirá entre este ejercicio y el próximo. Las consecuencias más inmediatas hablan de una repercusión de 240.000 euros para este año. Como puntos importantes cabe señalar la rebaja del IBI pactada para 2019, que rebaja el coeficiente al 0,481%. Se aumentará el personal de la Oficina de Turismo, subirán las ayudas a emprendedores, habrá incentivos fiscales a nuevos empresarios por valor de 50.000 euros -siempre que lo aprueben los técnicos municipales, puntualizó Guarido, y en todo caso a partir del 2019- y se dotará a los dos polígonos industriales con 50.000 euros -para cada uno- para su fomento y mejora. Se llevarán a cabo un buen número de actuaciones en el parque de los Tres Árboles -reposición del mobiliario, parque para mayores, espacios para grafitis y renovación de las pistas de juegos tradicionales- y se acometerá una actuación importante en San Torcuato para que recupere esplendor comercial -este año se empezará por la iluminación y el próximo ejercicio se comenzará a trabajar en el asfaltado-.

Todos los grupos y la concejala no adscrita subrayaron la "voluntad de diálogo" de las últimas semanas casi por encima de las novedades económicas que deja el acuerdo. "El equipo de Gobierno ha sido generoso y así lo han percibido los grupos de la oposición, algo que permitirá que el presupuesto entré en vigor cuanto antes", apuntó Francisco Guarido. El alcalde lanzó, eso sí, un aviso a navegantes porque "hay un límite a la hora de bajar impuestos". Centrándose en el IBI, que baja este año y bajará el próximo, Guarido recordó que desde la última subida de impuestos "en el año 2011, se han registrado varias bajadas mientras que el gasto del Ayuntamiento repunta. Hay que tener cuidado y ser rigurosos en estos asuntos porque el funcionamiento del Ayuntamiento conlleva un desembolso". El alcalde apostó además por llegar a acuerdos para los presupuestos del 2019, algo que posibilitaría llegar a mayo de ese año -fecha de las elecciones municipales- con un "gobierno estable aunque en minoría". Las cuentas, que van a comisión el miércoles, recibirán el respaldo del Pleno el lunes 15.