Las residencias que gestiona Cáritas -ubicadas en las localidades de Fermoselle, Toro, Carbajales de Alba, Villarrín de Campos y Alcañices- atienden a un total de 400 ancianos. Una labor social que ayuda a muchas personas que apenas cuentan con recursos. "El empobrecimiento de la gente mayor es cada vez más generalizado", denuncia Martín de Lera.

El delegado episcopal explica que, en este sentido, "con unas pensiones tan bajas es difícil que puedan acceder a residencias privadas, mientras que tener plaza en una pública lleva bastante tiempo, así que las de Cáritas se convierten en el último recurso para muchos".

La infancia también es otro de los sectores de la población con los que Cáritas trabaja, a través de los tres centros de los que dispone, dos en la capital y otro más en Fermoselle. Durante este año se ha trabajado con un total de 150 menores en el ámbito de la educación, una labor que también se ha extendido a sus familias.

Por último, este 2017 ha traído la consolidación de un nuevo programa desarrollado por el centro de acogida para personas sin hogar Madre Bonifacia. Este año se puso en marcha el proyecto de educación de calle, con el que han salido a buscar a las personas sin hogar para mostrarles con qué recursos pueden contar. "El 70% de los usuarios sin hogar han podido normalizar sus vidas", apunta Martín de Lera.

Cáritas de Zamora presentó su campaña de Navidad. Bajo el lema "Sé parte de nuestro compromiso", desde la organización se pretende hacer partícipes a los ciudadanos de su labor diaria. "Se puede colaborar de varias maneras. En primer lugar, conociendo la realidad para tomar conciencia de ello, porque está claro que lo que no se ve, es como si no existiera", reconoce Antonio Jesús Martín de Lera. Otra forma de ayudar es formando parte del voluntariado de Cáritas o haciéndose socio o realizando algún donativo. En este sentido, este último domingo del año, 31 de diciembre, se realizará una colecta especial en todas las parroquias a favor de Cáritas. Por último, Martín de Lera señala que este compromiso también se podría generalizar a mejorar el mundo. "Si podemos mejorar la vida de nuestros semejantes, se logrará este objetivo", valora.

Por otra parte, todavía se está a tiempo de colaborar con la iniciativa "El árbol de los deseos", con la que se pretende conseguir juguetes para el centenar de niños que Cáritas atiende diariamente. Este árbol está adornado con bolitas de goma eva, firmadas por cada uno de los niños, y con el juguete elegido. Las personas que deseen participar deben de coger una de esas bolas y depositar un donativo en la hucha colocada junto al árbol. Hay diferentes árboles en las residencias de mayores de Cáritas y en la sede central, en la calle Viriato.