Como estaba previsto, una nueva edición de villancicos jerezanos y otro nuevo éxito de La Peña Flamenca. Con un teatro lleno, sin llegar a rebosar, los seis artistas de la albariza tierra hicieron las delicias del público zamorano. Y que ¡delicias!

La Zambomba, después de tantos años celebrándose en Zamora, se ha convertido en un clásico imprescindible por estas fechas, de manera que los zamoranos responden fieles a la cita.

Como dije, los artistas "casi ya zamoranos de adopción", Pedro Garrido Niño de La Fragua, Coral de Los Reyes, Eva de Rubichi, Manuel de La Fragua y Juan Lara, fueron los encargados de las voces, las palmas, los jaleos, y la correspondiente patadita. Juan Manuel Moneo le puso el compás con la guitarra. Cierto es que la zambomba estuvo de adorno, pero le dio su cosita. Abre todo el grupo con Nochebuena de Jerez en compás de bulerías; para continuar con Lirio de los Valles, canción por tangos; compango de diversos villancicos que encandilaron sobremanera al respetable; Pedro, el gran señor de la ancestral y carismática estirpe fragüera, fiel heredero de su abuelo Juan Fernández Navarro, Tío Juane, "herreros de toda la vida en La Plazuela", presenta el espectáculo como nadie mejor que él sabe hacerlo. Lo releva su hermano Manuel para iniciar como solista, por aire de tangos y respaldado por todo el grupo. Me recordó a El Mono y casi se me sueltan dos lágrimas; sigue la simpatía personificada de Eva de Rubichi con tangos lentos -cadencia de tientos- para desgranar Arcángel San Gabriel; llega el turno de Pedro para hacer canción y balada flamenca de precioso envoltorio; Coral de los Reyes con su solvencia y saber estar interpreta Que se levante el aire, canción por bulerías con patadita incluida; continúan con Sirva tu cuna, Reina y madre y A Nazaret llegaron para volver a un popurrí de villancicos diversos qué volvieron a hacer las delicias del numeroso público.

Juan Lara dedica los campanilleros de Manuel Torre a su pariente Manuel Moneo (Hermano mayor de El Torta y Luis Moneo, padre de Juan Manuel Moneo, nuestro guitarrista)

Fin de Fiesta por bulerías. Nutrido y valorado. Abre Manuel. Continúa Eva. Juan y patadita de Pedro. Coral de Los Reyes: este vino es "tocinito de cielo" como preámbulo de su turno, dando paso al patriarca Pedro para rematar con bulerías de altísimo riesgo y obligada concentración.

El resultado final fue un prolongadísimo aplauso, con parte del público puesto de píe.

En definitiva, la noche resulto espléndida y preñada de buenas nuevas y renovadas esperanzas, como se corresponde con la época en que estamos.

¡¡¡Feliz Navidad y venturoso 2018¡¡¡