El anuncio, espectacular: "El Congreso de los Diputados aprueba la reapertura de la línea férrea Ruta de la Plata, entre Astorga y Extremadura, que lleva cerrada más de tres décadas y en parte está expoliada con los raíles robados y arrancados". La realidad es menos rotunda, aunque en todo caso esperanzadora de que se reabra el debate y quizás un estudio serio de viabilidad sobre la posibilidad de recuperar la histórica línea férrea que vertebra el oeste provincial.

Lo que pasó es que la Comisión de Fomento del Congreso aprobó una proposición no de ley que había presentado Podemos y que salió adelante con los votos del Grupo Mixto, PNV y el PSOE, aunque este partido limó un tanto el texto original para poder dar su apoyo. Fueron 18 votos que se impusieron a los 17 que sumaban PP y Ciudadanos.

La iniciativa recoge la realización de un estudio sobre el trazado más adecuado a las necesidades ferroviarias, características, actuaciones necesarias, coste y una posible planificación para su puesta en servicio, además de analizar las conexiones con los distintos corredores actualmente planificados y que forman parte de la Red Transeuropea de Transportes. La proposición abre el camino para al trabajo de incorporación de esta línea al Corredor Atlántico y pide comprometer presupuestos para el inicio, el próximo año, de los estudios ferroviarios y proyectos técnicos necesarios para los tramos comarcales de la línea, así como las obras de adecuación de la plataforma ferroviaria, la instalación y sistemas de señalización, comunicaciones y seguridad.

La iniciativa incluye la rehabilitación de las estaciones y promocionar las futuras conexiones comerciales, turísticas y de viajeros que den viabilidad económica a este corredor del oeste.

La diputada de Podemos por León, Ana Marcello defendió la reapertura para "vertebrar y dar sentido" a una "región especialmente castigada"; el socialista César Joaquín Ramos presentó una enmienda para que la puesta en funcionamiento se haga "a la mayor brevedad posible", ya que de lo contrario la proposición "no cumpliría con las leyes". El popular Miguel Barrachina calificó la propuesta de "grosería intelectual", ya que pide al Gobierno obras en 2018 en una vía está ya levantada en muchos tramos y comprometió su apoyo a las "vías verdes" y Fernando Navarro, de Ciudadanos no cree en "varitas mágicas" y recordó que la línea se cerró por su "baja demanda".