El primer semestre del año ha registrado en Zamora un total de 175 denuncias en los juzgados de la provincia por casos de violencia de género. Una cifra a la que hay que añadir 64 órdenes de protección. "Son mucho más que números, se trata de visibilizar el problema y poner nombre y rostro a cada uno de estos casos", subrayó el delegado territorial de la Junta, Alberto Castro.

La delegación territorial en Zamora reunió ayer a la comisión contra la violencia de género, para informar sobre los recursos de atención a mujeres y menores víctimas de esta lacra social durante este año. Castro reiteró la necesidad de la implicación ciudadana para erradicar los casos de agresiones físicas y psicológicas a mujeres y los menores a su cargo.

En Zamora existen en la actualidad 143 casos activos de seguridad y 51 víctimas tiene protección policial, mientras que 79 mujeres cuenta con renta activa por su especial situación. A pesar de ello, Zamora tan solo ha registrado hasta septiembre de este año cuatro llamadas al 016, el teléfono habilitado para las denuncias de agresiones sexuales, que no deja rastro en la factura telefónica.

La casa de acogida de Zamora protege en la actualidad a ocho mujeres y cinco menores. Además, el programa de apoyo psicológico con el que se cuenta para estas víctimas ha atendido a 19 zamoranas y cinco menores. Menos éxito ha tenido el Programa Fénix -destinado a maltratadores que quieren reformarse- puesto que solo una persona ha querido participar voluntariamente. Castro agradeció la colaboración en este terreno de Cruz Roja, puesto que su programa de orientación y acompañamiento jurídico ha asesorado a ocho mujeres.

Por otro lado, el delegado anunció que personal de la propia Junta y de las corporaciones locales habían elaborado un manual de intervención "donde se recogen pautas de atención a mujeres, las funciones de los coordinadores en cada caso y las fases del procedimiento de intervención con las víctimas, así como las diferentes prestaciones reconocidas legalmente y un mapa de recursos específicos de la provincia en esta materia, que se publicará en breve", detalló.

Por último, Castro aseguró que era especialmente importante una estrategia concreta para los centros educativos. "Según los últimos estudios, los menores no tienen una percepción grave de la violencia de género y uno de cada cuatro chicos lo ven como algo normal, mientras que el 21% lo consideran un tema politizado o exagerado por los medios", lamentó.

En este sentido, el IES María de Molina fue el centro elegido en Zamora para llevar a cabo una jornada de concienciación sobre la violencia de género entre los jóvenes que se desarrolló en centros de toda Castilla y León. Un gran lazo morado en el patio fue el símbolo elegido por alumnos y profesores para este día.