Más que una desagradable sorpresa se llevó un grupo de ciclistas zamoranos ayer por la mañana cuando circulaba en pelotón por el camino viejo de Villaralbo para hacer deporte y se encontró a lo lejos un vehículo volcado junto a la carretera y muy cerca de la acequia que discurre en la misma dirección, aunque sin llegar a invadir esta zona. Los deportistas se pararon junto al coche, de color oscuro, que se encontraba completamente boca arriba y tan solo con el maletero abierto, además del eje de la rueda derecha delantera totalmente torcido. Pero en la carretera no había ninguna señal de frenazo.

Al mismo tiempo pararon varios conductores que a esas horas -alrededor de las ocho de la mañana- circulaban por la misma vía. Con el temor de encontrarse algún herido dentro del coche, inspeccionaron su interior, pero dentro solo pudieron encontrar la llave puesta en el contacto todavía, pero ningún ocupante, con lo que se vieron sorprendidos por lo extraño de la situación. Fue una de las conductoras de uno de los vehículos que se paró en la zona la que se encargó de llamar a la Guardia Civil para informarle de lo sucedido.

Lo único que se resolvió de esta rocambolesca situación fue que el conductor, y quizá los ocupantes que lo acompañaban, debieron resultar ilesos del accidente, del que se desconocen las causas, puesto que salieron de su propio pie del vehículo, dejándolo abandonado en el camino viejo de Villaralbo. Por tanto, aunque la Guardia Civil se acercó hasta el lugar de los hechos, no se requirió asistencia sanitaria.