La necesaria renovación de más de una treintena de aceras de la capital será por fin una realidad merced a la inversión cercana a un millón de euros que materializará el Ayuntamiento de Zamora con cargo al presupuesto de las inversiones sostenibles. Se trata, ojo, de la reposición integral de los espacios peatonales y nada tiene que ver con el contrato de mantenimiento. Esto quiere decir que se construirán nuevas aceras o, en los casos que así lo requieran, se levantarán las actuales para volver a reconstruirlas posteriormente. El plan incluye tramos como los demandados en Cardenal Cisneros, la avenida de Vigo, la calle Peñausende, el cruce entre Libertad y Cardenal Cisneros o el paseo de Carlos Pinilla, que pasará a ser un bulevar del mismo estilo al existente entre Requejo y el Hospital Provincial.

El objetivo principal de esta inversión en aceras es contribuir a la accesibilidad total para personas con problemas de movilidad reducida y por ello todas las iniciativas irán destinadas a este público potencial. El presupuesto, que alcanza los 900.000 euros, servirá para ampliar el ancho de las aceras, dotarlas de una mejor vialidad e instalar en ellas mobiliario urbano como bancos, papeleras o árboles. En total, se materializarán 12.500 metros cuadrados de aceras, que en línea recta suponen más de seis kilómetros. Entre las previsiones, además, se incluye la colocación de 56 bancos, 35 papeleras y 137 árboles.

El desglose de la treintena de calles que van a ser repuestas de manera integral deja al descubierto zonas que los vecinos llevan reclamando desde mucho tiempo atrás. Por ejemplo, Cardenal Cisneros. En esta primera intervención, el Ayuntamiento de Zamora acometerá una obra total en las aceras que discurren entre la gasolinera que cruza con Requejo y la calle de Pablo Morillo, espacio "absolutamente hundido y que no está en condiciones para nadie", como ha señalado Francisco Guarido. Además, se efectuará la renovación de otro tramo entre la calle de Colón y el paseo de La Aldehuela, cuyo estado de conservación también deja mucho que desear.

La calle de Condes de Alba y Aliste sufrirá también una transformación en la zona que linda con la Escuela de Artes y el colegio San José de Calasanz. El objetivo aquí, apunta el alcalde, es establecer un auténtico paseo con un ancho de acera similar al existente en la avenida de la Plaza de Toros. Para ello, se ganará terreno en la calzada que separa el cuartel de la Guardia Civil de los centros educativos -donde habitualmente se aparca de manera ilegal- para establecer un ancho de acera aproximado de cuatro metros.

Práctica similar se llevará a cabo en la avenida de la Feria, en el tramo donde actualmente se están produciendo derribos de edificios para dejar al descubierto la muralla medieval. En esta ocasión, los metros de acera se ganarán en la zona interior, en los jardines. "El problema aquí es que los coches se comen el espacio para los peatones, por eso la idea es ampliar el espacio peatonal hasta los 3,7 metros aproximadamente, de manera que haya espacio suficiente para personas con movilidad reducida", apunta el alcalde.

Las obras incluyen también la construcción de una acera en la avenida de Vigo, en el tramo que discurre desde Trascastillo hasta la Hostería Real. Igualmente, se realizará una suerte de bulevar en la avenida de Carlos Pinilla, futura Reyes Católicos, del mismo estilo que el realizado años atrás entre Requejo y el Hospital Provincial.

En la margen izquierda, se diseñará una acera a la salida del puente de Hierro para conectar con la parada de autobús y se construirá desde cero otra acera para comunicar el camino de Villaralbo hasta las dependencias de Proyecto Hombre. Además, se renovarán completamente los espacios peatonales de la calle Peñausende y la plaza de Bermillo de Sayago.