Este artículo podría tener muchas presentaciones, de hecho, la presentación original no comenzaba con estas líneas. Hace unos días llegó a mis oídos que alguien, bien conocida en el mundo de la "farándula autóctona", dijo: "A lo único que se dedica es a escribir cerdadas en el periódico". Señora mía, desmelénese usted y haga rica su sexualidad. Tome notas de este artículo a pie de cuadernillo, deje el encorsetamiento puritano, y así, tanto su marido como usted, igual serían más felices en la cama.

¿TÚ SABES QUÉ ES ESO DEL SEXO ANAL?

Cuando un hijo suelta una pregunta de ese calibre a sus padres, qué lejos parece estar aquel feliz día en el que el pequeño dijo por primera vez "papá" o "mamá". Y qué poco conscientes eran los "papis" por creer que nunca llegarían a escuchar preguntas de este tipo donde, probablemente, sudaron la gota gorda.

Cuando nos vamos haciendo "mayores" solemos hablar de sexualidad con nuestros amigos, pero muy pocas veces se menciona la práctica anal. Desde pequeños nos han enseñado que el ano es la parte más sucia de nuestro cuerpo y que no hay que tocarla y, por supuesto, mucho menos gozar de ella, ya que sería muy vergonzoso, una perversión y/o todo un pecado. Quiero decirles que no lo es.

Cuántas veces hemos podido oír o decir la expresión: "¡Qué te den por el culo!"€creo que hasta forma parte del vocabulario diario de muchas personas€y qué queremos decir cuando por nuestra boca sale tal lindeza€que te hagan daño. Pero el sexo anal no es sinónimo de dolor, es una práctica más, dentro de la sexualidad y puede llegar a ser muy placentero utilizando la sensibilidad y el cuidado para/con la otra persona.

El coito anal lo pueden practicar tanto parejas formadas por un hombre y una mujer, así como por dos hombres o dos mujeres. Es la introducción del pene, dedos, dildo, vibrador€cualquier juguete sexual, en el recto.

Al recto llegan gran cantidad de terminaciones nerviosas y por ello es muy sensible a la estimulación sexual. Tanto las mujeres como los hombres pueden alcanzar el orgasmo a través de la recepción y los movimientos del pene en el recto.

El coito anal también es conocido como "sexo griego", se le dio este nombre debido a la bisexualidad de los hombres en la antigua Grecia.

La estimulación anal excita mucho a algunas parejas. Es posible estimular esta región con la mano durante el coito o en la fase anterior.

Si intentan practicar el coito anal procedan muy lenta y paulatinamente. Los músculos del ano son mucho más estrechos que los de la vagina y si la persona penetra con demasiada brusquedad, se corre el riesgo de causar lesiones corporales y/o dolor. Es indispensable utilizar un lubricante (con base acuosa para evitar la ruptura del preservativo, utiliza tu sentido común€utilízalo) ya que el recto no produce lubricación natural

Si nunca se ha practicado un coito anal es preferible comenzar introduciendo un dedo con suavidad y lentitud y después de algunas sesiones poder introducir varios. Una vez que se haya acostumbrado la persona receptora a la introducción de los dos dedos, inicie la estimulación con el pene o un juguete sexual pero introdúzcalo lentamente.

El recto, al no tener la elasticidad de la vagina hay que tener en cuenta la importancia de que la persona que va a ser penetrada esté relajada, ya que si está nerviosa o insegura, su ano se comprimirá y cualquier intento de penetración le causará dolor. Hay que ser generoso a la hora de administrar lubricante en el ano, pene, dedos o juguete sexual que se vaya a utilizar. Es importante que te fijes en sus reacciones, por ejemplo, si su ano se tensa y tu pareja tiene la sensación de defecar, espera un poco para que se acostumbre a la situación. Si al rato te dice que continúes, mueve despacio el objeto introducido en círculos, lateralmente, o metiéndolo y sacándolo. No tengas prisa. Pregúntale si está bien, si le está gustando y si es así, continúa estimulándole con sumo cuidado. Si por el contrario siente dolor, déjalo para otra ocasión, ya que el objetivo de esta práctica es el placer.

Una vez finalizada la práctica, retira el dedo, pene, o juguetes sexuales con suavidad, sobre todo si se ha producido el orgasmo del receptor, ya que la musculatura pubococcígea se habrá tensado.

Hay muchas posiciones para realizar un coito anal, pero una de las posiciones más favorables para este tipo de práctica sexual consiste en que la persona que va a ser penetrada se acueste boca arriba, con las piernas ligeramente flexionadas y las manos libres para poder guiar a su compañero tanto en la rapidez como en la fuerza de la penetración. Otra de las posturas es desde atrás, probablemente esta sea la número uno en ventas. Esta permite que la mujer estimule su clítoris a la vez que está siendo penetrada. Si es el hombre el que está siendo penetrado, también puede masturbarse. La postura del misionero posibilita la masturbación del receptor, favorece la comunicación oral y permite tocar otras partes del cuerpo. Si el receptor está encima, la persona que va a ser penetrada (él o ella) puede tener un control del ángulo de la penetración y la profundidad de ella, además de permitirle masturbarse o ser masturbada. Otra, muy común, es la postura de la cuchara, se suele utilizar entre parejas de alturas muy dispares, esta no favorece la penetración en profundidad, pero sí facilita la masturbación del receptor/a.

Es importante evitar el coito vaginal inmediatamente después del coito anal, ya que algunas bacterias naturales del recto pueden producir infecciones vaginales. Si se desea proceder al coito vaginal, inmediatamente después del coito anal, se recomienda utilizar otro preservativo diferente en el caso de haberse utilizado, si no ha sido así, han de lavarse cuidadosamente el pene con agua y jabón antes de pasar al coito vaginal.

Muchas mujeres dicen desear tener los dedos de su pareja metidos en el ano en el momento del orgasmo ya que elevan la sensación sexual al contraerse los esfínteres anales en ese momento. Algunos hombres pueden desear lo mismo, aunque muchos de ellos se resistan ya que asocian la penetración anal con una práctica que le toca desempeñar a la mujer, o bien, con la conducta sexual homosexual.

EL LLAMADO ANALINGUS ES LA ESTIMULACIÓN DEL ANO A TRAVÉS DE LA LENGUA, LA BOCA, E INCLUSO LOS DIENTES

Para la estimulación exterior hay diferentes formas, por ejemplo, el lametazo largo, intenso, en nalgas, perineo, orificio rectal; la rápida agitación lingual, directamente en el ano, rodeándolo, de arriba-abajo-arriba, laterales cambiando el ritmo; succiones con diferente intensidad, con mordisquitos delicados€; espirar lentamente aire caliente sobre sus genitales€Experimenta, todo vale, salvo la violencia, a menos que la otra persona te la pida.

No nos olvidemos del beso negro, consiste en meter la lengua en el ano, moldeándola para acoplarla con suavidad. Con esta técnica estaría bien utilizar las manos, mientras tu boca explora el ano, tus manos pueden ir mimando otras partes del cuerpo, incluso masturbarle o masturbarse.

¿Quieres practicar el coito anal? Pues adelante, pero, ante todo, suavidad y tranquilidad.

No practiques coito anal sin estar totalmente convencido de que realmente lo quieres hacer.

Siempre estando excitado y muy lubricado.

Si en algún momento has sido tú quien has propuesto el coito anal y en el último momento cambias de opinión, no te sientas culpable por ello. Y si decides después de haberlo hecho alguna vez que no quieres volver a intentarlo, tampoco. Puedes negarte a cualquier práctica sexual que para ti no sea placentera.

La buena sexualidad no es algo que te ocurre, es algo que tú haces que ocurra.