La remisión, dicen las cifras macroeconómicas y el Gobierno, de la crisis económica que durante los últimos años ha castigado a España no se traduce en una merma del número de desahucios, uno de los dramas más importantes durante los últimos tiempos. Los datos que ayer aportó el Consejo General del Poder Judicial atestiguan que, lejos de descender, el número de familias que se han visto obligadas a abandonar sus viviendas ha crecido en la primera mitad de este año en comparación con el mismo periodo del año pasado.

Así las cosas, entre enero y junio un total de 92 familias han tenido que dejar su vivienda por no poder hacer frente a los costes que conllevaba. Han sido 52 entre los meses de enero y marzo y cuarenta más entre abril y junio. Son más que las 87 familias que se vieron en la misma situación en la primera mitad del ejercicio pasado. La cifra de comienzos del año 2015, cuando la crisis económica era mucho más seria que en la actualidad, indicaron que 120 familias se habían quedado sin casa en el primer semestre. Sin llegar a esos extremos lo cierto es que, cada dos días, Zamora registra un caso de desahucio, una cifra alta para un territorio con las características de la provincia.

La mayoría de los lanzamientos -término jurídico que se usa en estos asuntos- derivan de la Ley de Arrendamientos Urbanos. 24 familias tuvieron que abandonar las viviendas donde residían de alquiler por no pagar las rentas acordadas con los propietarios del inmueble, que recurrió a los juzgados. 13 familias fueron despojadas de su vivienda al no cumplir con las cuotas de la hipoteca y tres más se clasifican en el apéndice de "otros".

En el segundo trimestre del año las entidades financieras presentaron 27 demandas en los juzgados contra familias o personas que no han pagado las cuotas hipotecarias, primer paso para iniciar el proceso que desemboca con la vivienda en propiedad de la entidad financiera y, en el peor de los casos, con una deuda millonaria para las familias. Estas 27 demandas se suman a las 21 del primer trimestre hasta hacer un total de 48. Son cifras similares a las registradas en los primeros años de la crisis económica.

Mientras, la Plataforma de Afectados por la Hipoteca comunicó la semana pasada que recientemente ha logrado una dación en pago para una familia de Toro que no podía hacer frente a los gastos de la hipoteca. El banco se ha quedado con la vivienda, pero la deuda ha desaparecido. A la vez, la PAH ha iniciado una campaña, dirigida fundamentalmente al Ayuntamiento de Zamora y a la Junta de Castilla y León, para que se ponga en funcionamiento un parque público de viviendas para las familias con más necesidades económicas. La plataforma asegura que solo el "banco malo" tiene 200 pisos en la capital, viviendas que podrían ser habitadas por personas sin recursos.