Zamora registra una sangría laboral que no cesa. El primer trimestre de este año ha sido el que más movilidad laboral ha registrado desde el año 2008, cuando comenzó la crisis económica, y lo ha hecho para mal. La marcha de trabajadores de la provincia se ha acrecentado mientras que el número de personas que llegan desde otros territorios del país se mantiene prácticamente invariable.
Por partes, entre enero y marzo de este año los zamoranos firmaron 3.049 contratos laborales con empresas que están ubicadas fuera del territorio de la provincia. Es la cifra más alta desde los 2.780 que se formalizaron en el primer trimestre del ejercicio 2008. Por su parte, las personas originarias de otras provincias que encontraron una oportunidad laboral en la provincia de Zamora formalizaron solo 1.207 contrataciones, casi tres veces menos. Esto no significa que estas personas hayan dejado la provincia, porque pueden encontrar trabajo en territorios cercanos y mantener su vivienda en Zamora.
El cruce entre ambos datos deja un saldo muy negativo, de 1.842 trabajadores según los datos que publica el SEPE en sus informes sobre movilidad interprovincial. Llevando esta cifra a los noventa días que componen el primer trimestre puede deducirse que, cada día, se registraron 20 contrataciones de zamoranos en otras provincias, un número excesivamente elevado.
Los informes del Servicio Público de Empleo Estatal dan además bastantes detalles sobre los trabajadores que entran y salen de la provincia de Zamora. Por sexos, la mayoría son hombres. El saldo es negativo en varones y mujeres, pero asciende a 1.226 personas en el primer colectivo y se queda en 616 en el segundo.
Por grupos de edad, como era de prever, son los menores de treinta años los que menos reparos tienen a la hora de dejar la provincia para encontrar trabajo en otra y, si acaso, establecerse allí. El saldo negativo de este colectivo es de ochocientas personas. Además, los zamoranos de entre 30 y 45 años firmaron 1.245 contratos fuera de la provincia, cifra en parte compensada con los 585 trabajadores que realizaron el camino inverso. Los mayores de 45 años, con más cargas familiares y económicas, son los que menos movilidad interprovincial registran.
Por niveles formativos, registran más movilidad los que tienen solo estudios primarios o no son capaces de acreditar su formación. Esto en términos absolutos, porque en números relativos la mayor movilidad se registra en las personas que tienen estudios superiores -además, muchos de estos trabajadores son jóvenes-. 446 personas con estudios superiores tuvieron que firmar contratos de trabajo en otras provincias entre enero y marzo de este año, mientras que solo 202 realizaron el camino inverso. Por nacionalidad, Zamora registra saldos negativos tanto en lo relativo a los españoles como a los extranjeros -hace aproximadamente eran más los extranjeros que venían a Zamora que los que se iban-.
Por sectores los mayores movimientos, en términos absolutos, se dan en servicios, situación lógica teniendo en cuenta que es el área económica que más personas emplea -no solo en Zamora, sino en toda España-. Los mayores porcentajes, en cambio, se concentran en agricultura y construcción, ambos cercanos al treinta por ciento. Por último, en lo que refiere a las ocupaciones, las relacionadas con la hostelería registran una movilidad interprovincial muy alta. La industria, donde el empleo es más estable, registra datos más bajos.
