La llegada de viajeros y el número de pernoctaciones registraron durante el pasado mes de julio datos más flojos que en el mismo periodo del año pasado. Los datos son, eso sí, muy similares, según la encuesta de alojamientos turísticos presentada ayer por el Instituto Nacional de Estadística. Por partes, Zamora registró en julio la llegada de 26.743 visitantes, un dato que está cuatro décimas por debajo del registrado en el mismo mes de 2016. Por lo que refiere a pernoctaciones, los hoteles y establecimientos del ramo registraron 42.297 reservas, casi un uno por ciento menos que el año pasado.
En términos regionales las pernoctaciones hoteleras subieron en Castilla y León un 2,33% en julio respecto al mismo mes del año pasado, al pasar de 828.760 a 848.035. Este crecimiento es ligeramente superior al registrado de media en el país, que se cerró con un aumento del 1,64%, hasta los 43,6 millones.
Del mismo modo, en lo que refiere a la cifra los viajeros que se acercaron a la comunidad, creció en un 0,84%, al pasar de 520.347 a los 524.724, mientras que la media en el resto del país se cerró con un 1,77% de subida, con 11,8 millones de viajeros. Por autonomías, Andalucía, Cataluña, Comunidad Valenciana y Canarias fueron los destinos principales de los viajeros residentes en España en julio, algo habitual durante los meses de verano.
El principal destino elegido por los viajeros no residentes en España fue Islas Baleares, con un 34% del total de pernoctaciones. En esta comunidad las pernoctaciones de extranjeros suben un 0,9%, respecto a julio de 2016.
Respecto a los datos por provincias, se observa que hubo un descenso de las pernoctaciones en Palencia, con una caída del 11,97%, hasta las 34.277, y en Burgos, un 5,66%. Por el contrario, las pernoctaciones aumentaron en Ávila, Valladolid, Segovia y León.
